Curvas desdibujadas.

Se desdibuja tu mirada, cuando
me ve poniéndote
las esposas.

Muerdo los labios lentamente y al ritmo
de la musica de contrabando.

Riego con wisky
tu cuerpo, borracho
de taberna, medico, abogado y quizás algún profeta.

De esposa a mujer de cama y hiel sin sentir ni calor, por vuestro deseo de placer tan sorbido como gélido.

Me dispongo a ser la dama de hielo, desabrocho el cinturón que luego pongo sobre tu cuello.

Me pongo el vestido que dices a tu mujer que no le queda bien.

Solo llevo un vestido quieres saber que llevó a parte de el.

La nada de tu vida, pensabas que era la mujerzuela de taberna dispuesta a complacerte.

Soy tu mujer la que ya no reconoces en la cama, soy la de las curvas xxl, soy la señora que ya no amas, por que ya no juega a ser la esclava
en tu mesa.

Con un rímel, he corrido, el sueño de todo hombre cobarde que busca lo que en casa no tiene, por que el mismo tiene un Tesoro que esconde.

El valor de una mujer esta en el alma en el porte y su presencia, y si la negáis su presencia, coqueteo e inteligencia.

No pretendáis que no sea una señora en vuestro lecho si le negáis

La libertad

 

Grandes verdades en tu poesía para reflexionar. Saludos.