Dámelo a mí que lo cuidaré bien.

Cuéntame batallas de tus ex y tus cameos,
que ahora yo seré quien bese en fallas tu carmín burdeos.

Juegos lentos lengua a lengua, no me menguan tus intentos.
Pinto invicto con instintos puertas que antes eran cuentos.

No me meteré en tus sueños porque aprecio tus espacios.
Muy despacio haré que cobren vida tus hoyuelos lacios.

Dime a mí sin miedo qué te aterra de la tierra
y haré guerra desvistiendo la tortura que te encierra.

Y ahora ven...ven... ven con un paquete aquí, coge tu cigarro gris,
no me van tus vicios pero quiero inicios junto a ti.

Crudo el camino a seguir, cruzo el charco a tu nariz,
juro que conmigo no vas a llorar jamás sin mí.

Bébete la caña mientras yo me bebo el mar,
beberé todas las gotas que no pueda consolar.

Más de mí tendrás, no lo detendrás,
mira las manijas porque el tiempo pasar no verás.

Dicen que lo bueno viene dado sin aviso,
dime tú si a tu guarida el viento ha entrado con permiso.

Hijo de Dioniso me lo aplico de poetiso,
no indeciso piso y quiero y guiso aquello que él no quiso.

 

Qué magnífico poema. Me encantó. Inmenso placer el pasar por tus letras. Todas las estrella. Abrazos desde el corazón

 

Muchísimas gracias GLAVIANA, me alegra mucho que te haya gustado tanto. Un abrazo muy fuerte desde Mallorca, Dani.