De aquel rito que nos unia

La luz brillaba pero...
La noche me salpicaba algunas sombras…
Lo eterno se desgarraba allí
Justo en las orillas del amor.
Tu corazón latía
El dolor se retrasaba
La razón nos vigilaba
Yo miraba tu espalda clavada en la obscuridad
Y poco a poco
Aquel rito calculado de la demora
Envolvía nuestro omnipresente silencio.
Siniestro plan del dolor
Que nos lleva a contemplar nuestros defectos.
Y el bien acusaba fatiga
Nuestras almas se saturaban de querencias falaces.
El mal recupera su dominio
El cuerpo se enajena e ignora
A aquel genuino dolor que nos recupera
Y nos levanta de nuestras transitorias derrotas.​

 

Hermoso, me encantó leerte.

 

k lindo poema jeje saludos desde RD cuidate suerte

 

Muchas gracias por leerme.......

 

Pues igual te mando saludos desde Peru

 

Me gusta eso de "justo en las orillas del amor". ¡Hermoso y cadencioso poema!. Un gusto pasar un rato por aquí. Sigue escribiéndonos cosas, Valentino. Saludos afectuosos, Daniela.

 

Pues te mando tambien un afectuoso saludo desde Peru....y seguire escribiendo cosas parati y para los demas........