De bueyes perdidos

Eres un buey,
un manso buey
si te dan de comer,
obedecés al amo.
Te necesita el rey,
para tirar su arado.
Y sembrar pobres,
por todos lados,
todos lados.

La puerta del corral,
abierta han olvidado.
Y tu sigues allí,
no te has escapado.
Es que a ser un buey,
ya te has acostumbrado.
Lo que es la libertad,
eso lo has olvidado
en el pasado.

Y en su juego,
de naipes muy marcados,
ellos son los reyes,
nosotros sus esclavos.
Juegan sus guerras,
nos usan de soldados.
Apostando el futuro,
de los que aún no han llegado,
no han llegado.

Ara con ellos,
levantate temprano,
juega para ellos,
pero ten cuidado,
pues cuando el tiempo.
Por fin haya pasado.
Se pone viejo el buey.
Y solo sirve de estofado.


Nunca te apartes
del surco prefijado.
Mejor no mires
lo que hay a tus costados.
Verás miseria,
verás allí estancado
todo lo que juntos
habíamos soñado,
en el pasado.

(2002)

 

Muy bien logrado, toda una genialidad. Un placer leerte


María Laura

 

Interesante metáfora!! XD jeje. Mis felicidades x este buen poema. Un saludo grande.

Marcos.-