De Penélope el arte.

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Se me escapa el deseo, se evapora,
la ilusión se retira a la otra casa
yo me quedo amasando la argamasa
mas no surge una idea, nada aflora.

Tal vez sea que llega al fin esa hora
de guardar los vestidos, toda gasa,
la sonrisa, el mohín, mirada rasa
y pasarse en recuerdos la deshora.

Pero duele esculcar, arcón maldito,
aunque ahí está el amor, también el grito
del dolor de mirarlo añicos hecho.

Como pasa la vida floreciendo
y a la vez se marchita pereciendo.
De Penélope el arte, hecho y deshecho.​

 

Y ya ves ella tenía esperanzas, su Ulises que no se sabía cuando volvería, ella tejía y destejía.
Somos las mujeres las que amamos eso es nuestro tejido, pero queremos más, es así?
y si no viene, lo inventamos. Un beso Penélope.

 

Querida catia, tejemos y tejemos y podríamos envolver el mundo en nuestro tejido de amores. Gracias por tan amable y bello comentario. Un abrazo.