Debiste haber pasado de largo

Debiste haber pasado de largo
y no quedarte.

Quién te mando a que me hagas caso cuando te
pedí que me aceptes.

Porqué no seguiste tu camino
dejándome a mí hacer lo mismo.

Y aún más, cuando ya te filtraste en mi vida
y te volviste mi sentido, un ángel, mi motor.

Y luego, sin reparos, la desbarataste
y repetiste la historia… una y otra vez.

Por qué entonces, cuando te rogaba
por qué, dime, por qué me escuchaste.


¿Para qué te quedaste?
debiste haber pasado de largo.

Ser indiferente a mi amor
pero no, tenias que acabar tu plan

Tenias que parar.
Tomar. Absorber. Jugar. Usar
Para luego desechar y marchar.

Dime ¿te fue divertido verme en tus manos?
¿Qué placer te dio verme llorar?

Qué habilidad camaleónica la tuya
para ocultar tu sadismo.

¿Para qué hacerme suplicar tu amor
si al final siempre tuviste preparado el adiós?

Reniel Floyer - Paraguay

 

vaya, cuánto dolor

recuerdo que en mis tiempos adolescentes también así, con esa ira, se sentía la derrota en el amor

un gusto pasar...saludos

pd: por ahí faltan algunos acentos

 

Gracias colega Francisco Lechuga, siempre un gusto tenerte por estos lares, y gracias por la puntualización ya le dare un vistazo Saludos colega!

 

Se cree que el corazón de una mujer cuando se daña,
es peor que el de un hombre dañado, mucho cuidado.

 

A veces nos engaña el corazón, y, la mayoría de las veces el otro le ayuda... Hermoso, un saludo.