1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

Decaimientos

Tema en 'Prosa: Amor' comenzado por Troto, 12 de Julio de 2020. Respuestas: 2 | Visitas: 428

  1. Troto

    Troto Pablo Romero Parada

    Se incorporó:
    31 de Octubre de 2014
    Mensajes:
    1.660
    Me gusta recibidos:
    1.266
    Género:
    Hombre
    Hace días que no encuentro ninguna sensación que sea capaz de convertir en frescura toda esta oscura pesadez. Algunas personas tienen difíciles formas de actuar, y yo no voy a poder comprenderlas. De hecho, me encuentro involucrado en un dilema personal. Un dilema de amores. A mis veinticinco años, trabajo por contrato fijo en el centro residencial ADCOR. Es un trabajo a jornada parcial donde no se cobra mucho dinero, pero a mí me llega para mis gastos.

    En dicho centro, conocí a una auxiliar de enfermería que me confesó su amor por mí. Ella es encantadora e increíblemente trabajadora. Es capaz de pasear por la planta cómodamente. Trabajando con dureza como si nada le costase. No se parece pues a mí, que me las paso en el despacho maldiciendo al resto de mis compañeros sobretodo en días como hoy donde el calor coarta mi respirar, provoca en mi piel un fatigoso sudor caliente; y además, enfurece a mi sangre que se encoleriza por casi cualquier motivo. Así, hoy me grité con una compañera de trabajo por una cuestión de poderes.

    El caso es que la chica tan guapa que se muestra enamorada de mí se llama Aida y yo también muestro sentimientos hacia ella en parte por todo lo descrito anteriormente. Salimos durante dos meses hasta que se enteró de que en los primeros días de noviazgo le puse los cuernos con una búlgara llamada Mariya. En este punto me parece importante aclarar que casi el completo de la plantilla del sitio en el que trabajo es femenino, y, también, que Aida es una persona que acostumbra a hablar de ese tipo de conflictos personales, así que ahora ejerzo mi profesión en un sitio donde hay como veinte o treinta trabajadoras que saben que le pongo los cuernos a su compañera. Cosa que no tendría porqué ser un gran problema, salvo porque últimamente se me da por fantasear y creer que tras cada cuchicheo hay alguna crítica hacia mí, o, que cuando alguna persona trata de desafiarme, es en parte aprovechándose de mi puntual debilidad y que no encontraré los apoyos suficientes debido a la infidelidad en cuestión. Aunque lo que debería hacer, seguramente, sería dejar de fantasear tanto y sencillamente hacer mi puto trabajo. Si no cuento mis problemas, es solo porque yo no suelo contar esos asuntos personales. Sea por timidez, introversión o una floja defensa judicial. Al fin y al cabo, Aida cuenta con mucha gente para idearle una buena defensa, y yo con mis pensamientos tan solo cuento con mi derecho a ejercer el silencio y otras bajezas así.
     
    #1
    Última modificación: 6 de Agosto de 2020
    A Anamer le gusta esto.
  2. Anamer

    Anamer Poeta veterano en el portal Equipo Revista "Eco y latido"

    Se incorporó:
    3 de Abril de 2017
    Mensajes:
    12.889
    Me gusta recibidos:
    12.391
    Género:
    Mujer
    Muy bueno tu relato, espero si que te perdone el desliz
    y puedas reanudar tus encuentros. Gracias por compartir
    tus letras en el foro. Besitos apretados en tus mejillas.
     
    #2
  3. Troto

    Troto Pablo Romero Parada

    Se incorporó:
    31 de Octubre de 2014
    Mensajes:
    1.660
    Me gusta recibidos:
    1.266
    Género:
    Hombre
    Gracias por escribirme habitualmente tan amables comentarios. Un saludo y un beso.
     
    #3
    A Anamer le gusta esto.

Comparte esta página