Decisiones...

Decidí entregarme por completo. así como lo hace una barca con las olas.
Decidí darme la prioridad de amarme, para poder después amar sin medidas, sin tapujos, sin miedos.
No busco un amor. O quizás si, pero no uno que sea prestado. Uno que me complemente, que a pesar de mis errores decida quedarse, que respete mi opinión y yo respetar la suya, que seamos cómplices, amigos, amantes, sin descuidar nuestra vida privada, aunque mi vida privada sea mas él que el resto de minucias. Que haga que me olvide del mundo asi como lo logra él cuando duerme, yéndose a un lugar en el cual no puedo acceder porque hasta cuando dormimos tenemos nuestros secretos, nuestro lugar preferido, ese lugar que es mejor para escaparse de realidades crudas que tanto mal le hacen a uno.
Pero tampoco quiero ser invasivo, respetar eso y sus secretos, esos momentos de soledad que todos necesitamos alguna vez, caminar solos para ver como enfrentar ese porvenir que tanto nos hace pensar, pero así y todo siempre volver a esa persona que hace la vida de un color diferente, que los grises vayan tomando colores brillantes, que los negros tengan matices, que la oscuridad se ilumine, que el camino se haga mas ameno, ayudar con cargas, compartir mochilas, porque una vez que lo haces el peso es mucho menor y logras mirar todo desde un punto de vista diferente.
Decidí acompañar, aunque no me acompañen. Tarde o temprano todo vuelve, lo que mejor hace al corazón son las cosas que haces por hacerlas y no por compromiso. La satisfacción que se siente al ayudar es inmensa, y aunque no sea retribuido no me importa,porque las enseñanzas son permanentes y te ayudan a ser mejor persona, porque sobre todas las cosas, sentirse bien con uno mismo es lo mejor.
Decidí soltar cosas, personas y lugares. Es difícil, creeme, pero es tan necesario algunas veces que cuando lo haces tu espíritu se libera, ayudándote a tomar nuevas oportunidades, a ser despierto y a ser independiente.
Decidí amar. Porque ahora sos lo que elijo, y quizás en unos meses o en unos años al ver estos escritos me ria y diga "que imbécil, tanto para nada" o quizás no, pero después pensaré que es lo que quería en este momento, que no cambiaría nada, que si las cosas se dieron así es porque necesitamos luchar para tener lo nuestro, y necesito romper esquemas y aprender a dejarme llevar para ser libre y dejar de amarte en secreto para que todos sepan que soy capaz de cruzar montañas y lagos para estar a tu lado.
No quiero lastima.
Quiero cosas genuinas, así como una sonrisa al despertar, un abrazo inesperado, un beso en el momento justo, una lagrima cuando lo necesite.
Quiero tantas cosas en mi vida, irónico que lo único que quiera es a vos, dándome las buenas noches con un abrazo cálido en este invierno bajo cero, y despertarte con un beso en la espalda, recorriendola hasta encontrar tu rostro dormido, que me sonrías, y que ese, justo ese, sea mi momento favorito del día o de mi vida.
Decidí soñar.
Decidí volar.
Decidí amar.