Déjame ir

Quería pedirte que no abras
cada día dulcemente las barreras,
frente al alma infantil escondida
tras cuentos escritos sin portadas.

Sólo… no las levantes para mí.

Rogarte que no me observes desnuda,
en el espejo reflejo de tus sombras,
ni un paso más bajo la cama extendida,
ni junto al consuelo de tu muleta.

Sólo… has alentado la necesidad de volar.

Quiero anotar en el libro de la vida,
que he aprendido a decir NO,
que he decidido decir SI,
elegir conmigo ser libre sin ti.

Sólo… suelta mi mano y déjame ir.

 

Si regresa...te pertenece. Así es el amor. Saludos cordiales.

 

Muy bello, siempre deberíamos decidir nosotros en estos y otros temas. Me ha gustado amiga Inma. Abrazote vuela. Paco.

 

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Firmes palabras de una mujer VALIENTE.

Y tu verso, verdaderamente jugoso al dulce sentido de la voz.
Gracias y felicidades. Hacen falta muchos poemas así.
Saludos