Dejo de existir...

Dejo de existir desde el instante en que te veo partir.
Desde el momento en que tu boca se desliza con mi boca en un último suspiro.
Dejo de existir mientras estás ausente,
las horas pasan lentamente.
El frío es más intenso y
el calor me quema por completo.
No hay balance ni armonía
si no estás, estoy perdida;
en un laberinto sin salida
esperando con locura tu venida.
Dejo de existir cuándo no te siento,
cuándo no te beso,
mi boca se convierte en un desierto.
Ya eres parte de mí y sin ti no se vivir
MI AMOR.​

 

Leyendo sus versos, le dejo mi huella de ello!​

Pepe*

 

Triste y melancólico poema compartes amiga Beatriz. Es triste ver partir a alguien a quien se ha amado, pero no queda ptra que seguir viviendo, aunque solo sea de recuerdos.
Enhorabuena por tus sentidos versos. Un abrazo

 

Que bonito sentimiento cercano a la melancolía, si él o ella se ausentan la espera es nerviosa, su ausencia se impone y su imagen se apodera de nuestra mente. Me ha gustado mucho como lo has contado amiga Beatriz. Abrazote maño vuela. Paco.

 

mille gracie

 

Ese sentido que nos habita cuando el eco de nuestro latido esta distante.
Múltiples son las aristas que se dibujan y que en contraparte retratan cuanto se ama.
Grato leerte
Saludos