Delirios de una ciudad en donde estés...

"Ohh, gran ciudad, llamada Antebrás. Tan llena de tus ferias de mirra y jengibre. Tan carmesí tu atardecer!
Antebrás, pueblo que pan y vino desayuna por las noches, donde un beduino cojo, maltrecho y herido,
se adentra en la espesura de un suburbio, aromas de frituras y rosas, estrellas que guían a pilluelos en sueños.
Tan linda ciudad, un mercader que viejo, camina por tus estrechos corredores, donde heno y paja, alfombran el suelo,
donde un rocío de plata te alivia del sol, del amor. Bellas muchachas, que ojos de un gato pardo enseñan,
que pieles de una fruta tan fresca, la hora en que un sorbo de agua se subasta en el mercado.
Aquí y allá habrá un pecado, que se esfuma en las esquinas, tan llenas de un humo traslucido, la luna se refleja
en el reflejo de tus ojos al sol del ocaso. Librados del mal, hay niños que en la arena.
Hay muchachas con frutales canastos, con túnicas livianas y abundantes, tan blandas, tan morenas sus mejillas.
Caminar con un sombrero pardo y gastado, sandalias de cordones recién confeccionados, por una novia del lugar,
Tan vulgar, este caminar, tan cierto este andar, donde la vida se mezcla con la transpiración, timadores y palmeras,
pétalos de seda, en las caderas de las primeras rameras, que certeras, se levantan cuando el sol en las 12 las espera.
Sombras busca el perro, sediento y austero, tintero, de una historia que se derramó en las veredas.
Mercader... ¿Viajarás hoy a Bagdad? Comprarás hoy el sequito de tantos camellos de carga, con ansias.
Un melón, que la salvación, inocente, esconde en su seno. Y cerceno, su duro caparazón. Al son, del meneo de una cuchilla
pesada de acero. Agua que libre de pecado, me baña la mano, con la misma mano que te acaricio el pelo tan largo y maltrecho,
pero delicado por demás, con tus dedos de sagaz, picardía, amada mía, con la luna te volveré a mirar a la luna, de tu ojos.
Tranquila, en esta vida tan fugaz y ordinaria, tan vulgar y exquisita, que con la fresca del aire, y la canción
de la tierra, se fue abriendo paso en el útero de tu apreciación."

 

Magnífico... me ha encantado tu escrito, me parece que describiste a la perfección la ciudad... muy bello.
Saludos.
Princesa Negra.