Dell diario de Claudia. Sin plagios.

Día en que mueres y quiero rescatarte.
No se como cubrirme para que muerte no me vea.
Es ella tan odiada. Tan indeseable en el camino.
No se que gritarle para que me muestre el orden de este laberinto llamado vida.
Cómo podemos acercarnos a aquellos que han partido.
Cómo puedo acercarme a ti, no para tenerte de nuevo , pues tu regreso es inoportuno, más si para sentir el calor que tu piel en esta tierra ha dejado.
Muéstrame donde encontrarlo, para que por unos instantes sea mi abrigo.
No hay calor en el otro bosque.
No existen las tierras cálidas sin ti.
No hay abrazos reconfortantes.
Explícame, dime que ha pasado...
Puedo inventar mil cuentos
Cientos de historias sin sentido que, como la muerte no se pueden explicar, mas no puedo decir con palabras el vacío que dejan los amores partidos.
Intento plagiar a tantos héroes que lo han conseguido, que han vuelto a reír tras las perdidas, más yo me niego en redondo a ser desleal incluso con eso.
Me he acostumbrado, sabes, a no copiar, no quiero decir lo que todos dicen, aunque a veces, el dolor se hace común, las grietas de las almas parecen a veces iguales, será eso plagio, me pregunto. No sé.
No quiero que sientas como yo. Mis dolores a veces son extremos, me los provoco yo.
Necesito romperme, hacerme heridas por dentro, necesito sentir los ríos de sangre que aun dolientes refrescan las hendiduras de la carne.
De otra manera, creo que mi vida sería solo un plagio de las miles existentes.
Necesito morir cada noche y al alba, volver a resucitar.
A ser nueva, a comenzar un nuevo camino.
SHA