...desde A.

a ti la noche te descalza los sentidos

para sacarte a bailar

sobre un piano que empíricamente

padece la melancolía de tus ojos…

y eso que aun

en tus mareas mansas

no cumples años

ni te has enterado que la realidad

no es de esos vocablos maleables

que en Viernes de emergencia

sueles golpear de piel en piel

hasta que solo queda vapor de agua

entre tus manitas de niña intrusa.


quizás pero eso

sigo de pixel en tu sombra

a la espera de que te hieras las rodillas

al caer sobre alguno de estos Septiembres

para ver si así

al menos

no te asustan estos cuervos reencarnados en cirros

sobre los que te sacaré a bailar

cuando le amanezca un ojo a mi huracán.







(...gracias Rosario)

 

Un día te daré las gracias
por las verdes a deshoras
y el exceso de café,
por la medicina de tus poemas
y sus efectos secundarios,
por el blanco
por el negro
por el ruido
por el silencio
por el jazz
por la pasión
por la rabia...

Debo tener por ahí guardados
un par de zapatos de aguja,
muy apropiados para los cirros
y que se joda la artrosis...
Un abrazo desde mi orilla

 

Es un poema precioso, Freud. Abrazos para ti y también para nuestra gran amiga común.

 

Poema de encuentro, de agradecimiento… poema.
Es un placer ver como las palabras dicen y en tus manos hacen poesía; y aquí llega un pixel más para agradecer el aporte y mandar tres abrazos a los aquí presentes.
Señor Freud, señora Rosario, señor Luis; encantado de venir.

 

Vuelvo a subir el poema por muchos motivos,
pero sobre todo porque me gusta.
Abrazos desde aquí...

 

Aquí vengo con un par de verdes, muy frías,
para brindar por los amigos, los poemas
y algún septiembre...
Un beso, compañero,se te echa de menos.