Desde mi buhardilla

Mi buhardilla
es un espacio especial,
pues no tiene muros,
ni puertas ni ventanas,
solo yo puedo entrar,
mi buhardilla está en mi mente
ahí guardo mis poemas en un cofre azul
pero a veces se desliza
por algun resquisio,
una gota de un triste recuerdo
que me hace mucho mal,
a esas gotas las arrojo a un rincón
donde no da el sol,
donde ni la yesca crece,
solo así estoy en paz.

Cuando escucho la algarabia de mis nietos al llegar,
es la hora de parar,
de salir de mi buhardilla,
de vivir la vida,
de volver a la realidad,
es un dulce despertar
olvidarme de mis poemas,
de olvidar por un momento mis recuerdos
que a veces me hacen llorar
y reir a carcajadas
de escuchar esas risas infantiles
que me hacen recordar
los felices momentos
de mi ya lejana niñez,
verlos correr
por recamaras y patios,
eso me hace muy feliz.

Jose Manuel Muro Mora...----------

 

He tenido el placer de disfrutar a la nieta de mi esposo, sin embargo, espero poder disfrutar pronto los míos y puedo decir que el sentimiento hacia un niño (cualquiera que sea el caso) es algo que nos llena inmensamente y nos ayuda a desestresarnos y a desconectarnos de todo aquello que debiera de ser irrelevante en el día a día. Me ha gustado haber pasado recorriendo tus líneas. Un abrazo y estrellas.