Deseo

Si te desnudas,
ten cuidado con mis ganas,
ten piedad de mi desvelo,
de mi sensación de ardor.
Y si desatas tu piel,
ten en cuenta que me muero,
por devorar tu cintura,
por saborear sin mesura,
la dulzura de tu miel.
Si dejas tu espalda libre,
como se libera la oruga,
en vuelo frenético y puro,
de mariposa a la flor.
Ten en cuenta que yo quiero,
ser polen entre tus alas,
hacia tu escapula blanca,
y en tu surco vertebral.
Si te despojas del vestido,
y respiras fresca en mi cama,
ruego tu cuerpo tener,
bordeando todos tus pliegues,
tus valles y tus cimas,
que por amor tu me deje,
tomarte por mi mujer.

 

Sugerente y sensual poema en el que triunfa el amor y el deseo. Me ha gustado mucho amigo Carlos Gabriel. Un abrazo. Paco.

 

gracias Paco abrazo