Destino presente

En piedra irromp¡ble,
marcada con martillo y cincel,
la eternidad es predecible;
idea amarga como la hiel.

¡Vayan Hados impíos!
Diviértanse con el provenir
de pobres hombres nacidos
sin más destino que morir.

¿Coincidencia? ¡Pues cuánta!
Entiendan ya, almas ingratas;
la vida decidida está.

No aflijan estas palabras,
sus corazones,
sólo verdad han de ser.
¿No lo han visto ni sentido?
¡El presente siempre es ayer!
Vana ilusión inexistente;
pues decir no podrá:
¿En qué momento es presente?
Si esto ya quedó atrás.
¿Cuándo se "decide"
si el futuro nunca llega?
pues veloz, ni en un instante,
a pasado se moldea.

Pasado y futuro se cortejan
en línea invisible; presente.
Si al tiempo no entiende la mente,
pues infinito y abstracto se crea,
entonces ¡valga muerte consciente!
¡Estúpida idea es el presente!
De decidir tiempo no da;
por suerte esta idea se implanta:
la línea marcada está.

El presente, en fin, no exsiste.
En el futuro decisiones tomadas ya;
es el pasado el único real.
¿No lo ves, hijo de piedra?

¡La vida escrita está!

 

Estimada Azura:

Excelene poema nos presentas, muy reflexivo el contenido. Es una duda interesante la de si el tiempo en realidad existe o es solo una ilusión de la que nos valemos para ubicarnos en este mundo.

Un placer leerte, gracias por compartir tus originales versos.

Saludos y buena vibra

 

Los hijos del ayer, son los que han envejecido mucho antes, en lamentable, esto es reflexivo, tengo la necesidad de volver a leerlo... Saludos