Día XX

Debo mirarte y con ternura decirte
que quiero llevarte muy hondo en la oscuridad
para que otras luces nazcan
o para morirte sin que nadie me culpe.
Después al separarse nuestras mitades
de ese especie de unión simbiótica que mentimos
vendrá la memoria a aguzar una eternidad falsa,
y es tan ilógico. Tu y yo, debemos cuidarnos.

Engastaré tus dientes en mi piel,
no se como, ni cuando, pero lo haré
y a las dormidas curvas de tu cuerpo despertaré,
y aunque tus rojos y sátrapas labios
me ordenasen combatir contra el mundo
primero lucharía contra tu lengua
una y otra vez hasta que me ames y me desuses,
de nuevo, otra vez, como siempre lo he imaginado.

Y si nunca me amas, los músculos y los nervios me serán espinas.
Como un torpe faquir tendré mil vidas que arriesgar
pero a tu temprano encanto, siempre en tus costillas estaré sonriente.
Y si no estoy, y si olvido que mi arte es minar tu inocencia
espero que cuando crezcas me despiertes de la luz y me invites muy hondo en la oscuridad.

 

Preciosas imágenes que conmueven amigo... un universo que disfruto pasear...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...