Diamante.

Llevé cosas, y sueños del amante
en las tuyas dejé restos de amor,
cuantos días tan felices en semblante
los tuviste, ahora tristes de dolor.

No supiste del alma que sangrante
revelara reflejo en exterior,
te mostré mi sonrisa de infante
insensible observaste algún temblor.

Percibí tu sonrisa triunfante
que brotara en perverso desamor
y me fui como va el caminante.

Me cegó brillantez de aquel diamante
por colores mejores que la flor,
hay amores que duran un instante.

Bohemio
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Me gusto, hay pasión y eso me agrada, bienvenido paisano un gustazo leerte.

 

Te saludo con mucho gusto amigo José desde la tierra de la bamba y la jarana, creo que pronto subiré alguna calavera, tradición mexicana, comparto algo parecido. Un abrazo.

Con una dama.

Voy a ir a la cita, voy con suerte
ya me espera la dama en una cama,
cuando voy me confiesa mucho me ama
yo le dije, nací para quererte.

Muy coqueta me dijo, he de tenerte
como fruto colgado en una rama
y al ponerte tan rojo como flama
en su punto será hora de comerte.

Quien tuviera de damas la mejor
y comiera también de los cerezos
y quedara en el instante ya inerte.

Es por ella que doy todo mi amor
los que queden comiencen ya los rezos,
pues yo voy a mi cita con la muerte.

bohemio