Días de color canela.

A veces no puedo escribir,
lo siento fatal, pero tú escribes
con impunidad, como eres tú,
de forma linda y brillante,
precisa y ordenada,
como las calles
europeas.

Sin embargo,
la idea de escribir me persigue,
sus placeres prohibidos me atraen,
pero no soy susceptible y escapo,
como un ciervo, hacia los prados
donde no se menciona la musa,
sino patatas fritas.

Oh, poesía, no niego
que viro en torno a ti porque
siento como si fueras mi sangre vital,
pero el desespero crece, como la arena
al borde del mar cuando planto mis versos
sin glamour, pero posibles gracias al amuleto
de la cerveza contra la vergüenza, al menos por un tiempo
o la sobriedad revela la realidad.

A veces, la poesía es curiosa e interesante.!

Salud!

Fidel Guerra.
Oct 19, 2025.

 

Poco que objetar, compañero.
Pienso que lo verdaderamente importante es que nuestros escritos nos gusten y convenzan a nosotros mismos y que, con el tiempo, volvamos a releerlos y a sentir las mismas sensaciones que cuando los creamos, con o sin cerveza.

Es mi interpretación.

Saludos.

 

Tal cual, así nos sucede, a veces, con la misteriosa poesía... Se esconde por poco o mucho tiempo, hasta que aparece triunfante, de la nada. Saludos y feliz cerveza.