Digo, luego pienso

Digo, luego pienso

En dimes y diretes ando y pienso
que cuando pienso, pienso demasiado,
y decir lo que pienso, sin cuidado,
jamás me lleva al punto del consenso.

En dimes y diretes soy propenso
a no hacer caso más que a lo acordado
por mi propio discurso, inapropiado
en el decir, y en el pensar, muy denso.

Extenso es el dechado de sandeces
que suelo propugnar sin estrecheces
cuando se tercia bulla entre gallitos.

Inmenso y alocado es el corral
de dimes y diretes, tal y cual,
para absurdos debates infinitos.

 

Yo maldigo (Blasfemo) y no lo pienso
porque sale, sin pensar
que lo que digo es testigo
de una emoción peculiar.

 

Viene a ser un poco lo mismo que decía yo, pero de otra manera.

Saludos

 

Por decir poco, mucho digo
brotando ducho el pensamiento,
por callar mucho me maldigo
al guardar calla el sentimiento.

Un abrazo Líricodetrito.

 

Gracias por la poética respuesta.

Saludos cordiales.