Dilema en velas

Hecho un pensamiento veloz,
de pronto la mano media fría del viento
pinta un cuadro vivo de par en par,
deja entrar la noche estrellada,
un coche chocado del que vengo a ser sin pedirlo
una suerte pasajera librada de una muerte ligera,
aunque la cama siga siendo una tumba,
aunque me quiera quedar.

Hecho un pensamiento veloz,
la cama encuentra todos mis lados;
me hallo entre el sótano y la azotea
de cierta casa con cara de puente,
entre la oscura frescura, irreposable tendido,
irresponsable, de un sueño insaciable nutrido
que lo mismo me mantiene vivo que dormido.

Hecho un pensamiento veloz,
cuesta arriba me vengo abajo
sin que nada me cueste;
enciendo todas las estrellas,
me bebo todos los ríos,
pero igual sin dar
por qué lado se me escapa el alma.

Hecho un pensamiento veloz,
factura y fractura,
en algún rincón del uni-verso
me arrugo con el rostro cubierto
de martirio y alivio;
no levanto la frente ni bajo los brazos,
me repliego y blasfemo hasta el alba,
dónde cuernos han dejado mis alas,
y una lágrima sabe a-mar.

 

Una bella poesía nos dejas y me complace haber pasado por el universo de tus letras. Escribes muy bien. Sentimiento, musicalidad, sensibilidad, ternura y reflexión son los ingredientes de esta receta de versos. Saludos, repu y estrellas.