Dos sombras.

Dos sombras.

La luna me despertó.
No estoy solo, no soy un astro
No soy un árbol, soy la caca del pájaro
No soy el lastimado, soy quien lastima
No soy la calma, soy la tormenta destrozada
Sé cómo vivir, mas no sobrevivir
Se llorar, mas no sé cómo parar
Se gritar, mas no escuchar
No estoy triste, pero es triste ver la realidad
Le dije buenas noches mientras se metía y salía el sol
Mi sonrisa llego al verlo, tome un vaso de agua y comencé a sudar
La obscuridad es mi fuerte de lamentaciones
La luz mi doble cara sonriente
La obscuridad mi aliado solitario
La luz mi residuo falso y falsificado
La obscuridad mi segunda sombra favorita
La luz una cuarta personalidad inventada
La luz un cuento de historias crucificadas.
Los puedo maldecir, ¿pero quién me maldice a mí?
¿Ustedes por haberlos maldecido primero?
Solo seguiré llorando porque la luna dura menos tiempo y nadie puede conocerme.

 

La calidad y la inspiración bellísima, hermoso.

 

muy bello amigo, solo un consejo menos mayúsculas,.. nada mas por lo demás todo esta bien.

 

Gracias.

 

Muchas disyuntivas y aseveraciones para dejarnos un poema para reflexionar. Saludos cordiales.

Muchos acentos ausentes.