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Dulce María Loynaz

Tema en 'Biblioteca de Poetas consagrados en verso libre' comenzado por lluvia de enero, 11 de Mayo de 2015. Respuestas: 0 | Visitas: 1780

  1. lluvia de enero

    lluvia de enero Simplemente mujer

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    Dulce María Loynaz

    Dulce María Loynaz y Muñoz (La Habana, 1903 - 1997), poeta y narradora cubana cuya primera obra se inscribe en el posmodernismo insular, dentro del cual fue la figura más representativa de la línea purista. Dulce María se educó en su hogar bajo la atenta mirada y los cuidados de su padre, y ni ella ni sus hermanos asistieron jamás a un colegio. Pese a ello, adquirió y asimiló en profundidad una vasta cultura, que alimentaría toda su trayectoria literaria y que se reflejaría en cada una de sus palabras. En 1919 publicó sus dos primeros poemas, Vesperal e Invierno de almas, en el diario La Nación, que significaron la entrada de Loynaz en el mundo de las Letras. Posteriormente, estudió Derecho Civil en la Universidad de La Habana, y se doctoró en 1927. Fue doctor "Honoris Causa" por esta misma universidad. En 1928 empezó a escribir su novela lírica Jardín, que terminaría siete años después y que no se publicaría en España hasta 1951.

    La lírica de Loynaz sedujo por su sencillez y naturalidad y el ritmo y la musicalidad de sus versos, en los que predominó una temática en ocasiones fruto de la angustia y del enigma y motivada por el amor.
    Es fundamental en su estilo la influencia de Juan Ramón Jiménez. En las composiciones de Loynaz encontramos una ternura, delicadeza y melancolía que recuerdan, sin duda alguna, la expresión intimista de Platero y yo, la popular obra del poeta. Él mismo reconoce estas semejanzas entre ambos en un artículo del año 1942, que publica en la revista semanal Buenos Aires. En 1929 viajó a Turquía, Siria, Libia, Palestina y Egipto. En este momento escribió su obra Cartas de amor al Rey Tut-Ank-Amen, inspirada por su visita a la tumba del famoso faraón. Un año después conoció a García Lorca, con el que mantuvo una entrañable amistad y que fue uno de los muchos amigos que hizo en España.
    En 1946 contrajo matrimonio con el periodista Pablo Álvarez de Cañas, originario de las Islas Canarias. A partir de este momento inició una serie de viajes que la llevarían por gran parte de América del Sur (Chile, Argentina, Uruguay y Brasil), y desde 1947 hasta 1958, también por España, país con el que mantuvo una profunda relación y que visitó en numerosas ocasiones. Dedicó a esta tierra gran parte de su obra, que tuvo en ella una enorme y cálida acogida. Su persona siempre fue recibida con honores, y fue galardonada en diversas ocasiones por su talento poético. En 1947 recibió la Cruz de Alfonso X el Sabio, en 1951 fue elegida Miembro Correspondiente de la Academia Nacional de Arte y Letras, y homenajeada en las Islas Canarias, donde fue declarada Hija Adoptiva de Puerto de la Cruz. Un año más tarde, Gabriela Mistral la propuso como candidata al Premio Nobel de Literatura. En 1953 la Universidad de Salamanca le otorgó a modo de homenaje la cátedra Fray Luis de León, y el mismo año asistió como delegada al Segundo Congreso de Poesía, presidido por Azorín. Dos años después fue nombrada académica de la Real Academia de Bellas Artes de San Telmo. De esta época son las obras Juegos de agua; versos del agua y del amor (1947); Mi poesía autocrítica (1951); Poemas sin nombre (1953); Obra lírica (1955), que recopila todos sus versos anteriores; Últimos días en una casa (1958) y Un verano en Tenerife, publicado el mismo año.
    Tiempo más tarde regresó a su tierra natal y a la paz de su casa de El Vedado para dedicarse desde allí a la literatura. También en Cuba se reconoció su valía, y se la tuvo en gran estima, siendo elegida miembro de número de la Academia Cubana de la Lengua en 1959, condecorada con la Distinción Por la Cultura Nacional por el Ministerio de Cultura de Cuba en 1981, y proclamada miembro Emérito de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba en 1989.
    Cabe destacar también sus obras Nueve poetas cubanos del siglo XX; Fe de vida; La novia de Lázaro; Antología lírica; Poesías escogidas (1985); Bestiarium (1991), que recoge algunos de sus pomas breves escritos en los años veinte, y Poemas náufragos (1991), por los que recibió el Premio de la Crítica en Cuba de 1992. Este mismo año se le otorgó el Premio Miguel de Cervantes de Literatura en España, siendo elegida entre candidatos como Mario Vargas Llosa, Camilo José Cela y Rosa Chacel, entre otros. Por la pureza de su voz lírica y su cautivadora expresividad, se la considera una de las representantes femeninas más ilustres de la poesía latinoamericana.

    Datos biográficos extraídos de: http://www.biografiasyvidas.com/biografia/l/loynaz.htm


    ***************​

    DIVAGACIÓN


    Si yo no hubiera sido....
    ¿qué sería en mi lugar?

    ¿Más lirios o más rosas?
    0 chorros de agua
    o gris de serranía
    o pedazos de niebla
    o mudas rocas...

    De alguna de esas cosas, la más fría
    me viene al corazón que las añora.
    Si yo no hubiera sido,
    el alma mía repartida
    pondría en cada cosa una chispa de amor...

    Nubes habría
    más que otras nubes lentas...
    (¡la nube que podría haber sido!...)
    ¿En el sitio, en la hora de qué árbol estoy,
    de qué armonía más asequible y útil?

    Esta sombra tan lejana parece que no es mía.
    Me siento extraída en mi ropaje
    y rota en las aguas,
    en la monotonía del viento sobre el mar,
    en la paz honda del campo,
    en el sopor del mediodía!...

    ¡Quién me volviera a la raíz remota
    sin luz, sin fin, sin término y sin vía!


    ***************

    SELVA


    Selva de mi silencio,
    apretada de olor, fría de menta.

    Selva de mi silencio, en ti se mellan
    todas las hachas; se despuntan
    todas las flechas;
    se quiebran
    todos los vientos.

    Selva de mi silencio, ceniza de la voz
    sin boca, ya sin eco; crispadura de yemas
    que acechan el sol,
    tras la espera
    maraña verde... ¿qué nieblas
    se te revuelven en un remolino?
    ¿Qué ala pasa cerca
    que no se vea
    succionada en el negro remolino?

    (La selva se cierra
    sobre el ala que pasa y que rueda.)

    Selva de mi silencio,
    verde sin primavera,
    tú tienes la tristeza
    vegetal y el instinto vertical
    del árbol. En ti empiezan
    todas las noches de la tierra;
    en ti concluyen todos los caminos.

    Selva apretada de olor, fría de menta.

    Selva con tu casita de azúcar
    y su lobo vestido de abuela;
    trenzadura de hoja y de piedra,
    masa hinchada, sembrada, crecida toda
    para aplastar aquella,
    tan pequeña,
    palabra de amor...


    ***************​








     
    #1

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