Efímero existir

En ese momento me pregunte -¿La vida sigue teniendo que fluir sin planes?, por ejemplo; un hombre cohabitando en un laberinto sin salida donde el final resulta ser el mismo para todos, nunca sabra si en verdad no tiene salida debido a que los muros altos siempre superaran su campo visual, lo único que sabe es que en algún día va a morir y lo mas probable es que sea dentro de ese laberinto que lo tiene atrapado. ¿La respuesta se reduce a el camino que tiene enfrente?, llevándolo a tomar la decisión de intentar perpetuar su existencia generando una posible salida mas ficticia que real, o simplemente sentarse a contemplar los muros decidiendo caminar por las noches en la obscuridad mientras se estrella contra ellos, o esperar a que por las mañanas el sol ilumine los senderos para continuar su travesía sin ningún peligro.

Quizás la felicidad de ese hombre no radique en la salida, sino en poder contemplar los caminos mientras se desplaza por ellos, conocer a sus semejantes mientras ve las hojas verdes junto con las ramas floreadas cayendo y formando un conjunto multicolor, o tal vez contemplar el amanecer cálido que entra por la parte superior de ese laberinto.

Carlos me puso en un dilema, soy consciente de la parcialidad de la vida y mi futura muerte, por lo que nació mi pregunta sobre que es mas sensato ¿dejar de hacer planes teniendo en cuenta que ni siquiera el siguiente segundo de mi vida se encuentra asegurado?, o continuar mi vida con una venda en los ojos esperando que el día a día me vaya sorprendiendo poco a poco.

Supe que lo que hacia estaba mal, es inútil planear, pero también lo es no hacerlo. Me di cuenta que lo importante es contemplar el camino siendo consciente de que esto acaba en un momento, quizás se que lo mas probable es que no existe una salida, pero lo esencial es hacer que tu camino por mas aleatorio que pueda ser, siempre llegue a un lugar por mas insignificante que este sea, porque el día que deje de ser así, tus objetivos dejaran de ser importantes para ti, por lo que no lo serán para nadie mas, haciendo totalmente inútil respirar un minuto mas en ese lugar.

Algunos llegan mas rápido que otros a su final, unos ni siquiera se dan cuenta que se encuentran en un laberinto mientras otros viven caminando por las noches, unos pocos deciden esperar la luz del día para que ilumine sus caminos y quizás lo mas deprimente, es que muchos pasan su vida entera creyendo que existe una salida.