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El aire

Tema en 'Prosa: Generales' comenzado por Sergio D'Baires, 14 de Marzo de 2021. Respuestas: 1 | Visitas: 395

  1. Sergio D'Baires

    Sergio D'Baires Exp..

    Se incorporó:
    26 de Febrero de 2021
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    El dia 24 de junio de algún año compramos un aire acondicionado marca "Premier" en una casa de artículos del hogar de la Avenida san Martín.
    No sospechabamos en ese momento la aventura (¿o debería decir desventura?) en la que nos metíamos.
    Cuando llegamos al domicilio, desembalamos el "equipo"; y siguiendo las instrucciones del "Manual del Usuario" lo mantuvimos tres horas inmóvil antes de conectarlo a la corriente eléctrica, que comprobamos (el manual lo recomienda fervorosamente),era: de 110 voltios.
    El "aparato emitió el pitido que nos indicaba que ya estaba operativo.
    Después de realizar las conexiones físicas para la expulsión del aire caliente al exterior, pulsamos la tecla que pondría en marcha "el artilugio".. eran las 20 y 30 y la temperatura llegaba a los 33 grados centígrados.
    El sonido de la turbina de ventilación inundó la habitación y un minuto más tarde el run run del compresor acunó el aire(ahora frío) que suspiraba a través de la reja del "Aire".
    A las 4 y 30 de la madrugada nos despertó un ruido espantoso, medio dormido desconecté el "Aire" y me sumergí nuevamente en el sueño mientras el indicador de temperatura del equipo; indicaba 26 grados centígrados.
    Las 8 y 30 de la mañana nos sorprendió nadando en el sudor que los 29 grados de un día tropical prometía aumentar.
    Por las dudas; esperando que todo fuera un "sueño" encendí el "aparato" que respondió inmediatamente; con una serie de ruidos escalofriantes; al llamado del "Control remoto". Preocupados no miramos y desistimos.
    Como era domingo no podíamos sino esperar hasta el lunes veintiséis para hacer el reclamo. La temperatura de treinta y dos grados convirtió a la siesta dominguera en una batalla de humedades y al amor nocturno en un baño turco de cuerpos pegajosos y gozos abandonados.
    Al día siguiente llamé al negocio de "electrodomésticos" donde lo había adquirido; me sugirieron amablemente que lo llevara hasta allí para que ellos se "encargaran" del asunto.
    Cargué el "equipo" en un taxi(sin taxímetro);(el chiste me costaría la nada despreciable suma de 25.000 bolívares(diez dolares)); ante la mirada impasible del "taximetrero" y enfilamos hacia allí.
    Cuando comprobaron el espeluznante sonido que emitía el "acondicionador de aire portatil" me lo cambiaron por otro; como "Un favor especial"(cuando en ese país la ley de defensa del consumidor los obliga expresamente a eso).
    Volví(ella se había quedado en el trabajo) con el nuevo "aparato", con una sensación de profunda gratitud(Masoquismo consumista que le dicen), y luego de oblar nuevamente el transporte me dispuse a sumergirme en las delicias del mundo "Premier" por segunda vez.
    Dejé "descansar" al "artículo del hogar" tres horas y después de instalarle la descarga de aire al exterior lo conecté a los ya archicomprobados 110 volt a/c 60 Hz.
    Me extrañó no oir el pitido de conformidad que estos aparatos hacen cuando uno los conecta a su alimento.
    Los "LED" de encendido apagados me advertían que algo no andaba bien.
    Lo "desenchufé" y volví a "enchufar" en el tomacorriente unas veinte veces, pensando ingenuamente en una falla de la red ; medí la tensión con un "tester" y no obstante la medida(110 voltios) "enchufé" un "velador"(lámpara de "mesa de noche") para saber si llegaba la energía correctamente.
    Llamé nuevamente al vendedor(la verdad era que sentía verguenza ajena e inocente culpa) explicándole que el "bendito artilugio" esta vez ni siquiera "se encendía".
    Creo que advertí una nota de piedad en su voz cuando me aseguró que él se encargaría del asunto; que esperara su llamada.
    Cuando "ella" llegó del trabajo con la esperanza de refrescarse en el clima artificial me encontró "velando" al "muerto".
    Pude advertir en su mirada resignada el desconcierto que le producía que a un "hombre" y "técnico" le pasara lo mismo que a cualquier "hija/o de vecino" y lego comprador de tecnologías.
    Procedí a contarle los pormenores mientras una pregunta nacía en su mirada.
    -...pero ¿No lo probaste antes de traerlo?
    Me justifiqué(ni siquiera yo estaba convencido) con el argumento de la caja cerrada en fábrica etc.etc. ..ante su mirada comprensivamente sarcástica y femenina( ¡jua, jua, jua!)
    A esta altura ella y yo pensábamos que estas máquinas nos odiaban por alguna razón que no comprendíamos.
    Los días 26, 27 y parte del día 28 esperamos la llamada sin éxito mientras el calor arreciaba. A mediodía del jueves una responsable del negocio me llamó para avisarme que mandarían a un empleado del mismo en una camioneta Chevrolet roja para cambiarme el Aire acondicionado portatil "Premier" por uno nuevo, en caja cerrada, de la misma marca y modelo. Pidió disculpas por algo de lo que él no tenía culpa(según él) y aseguró eufórico que ya no habría más problemas pues me mandaba un equipo en caja y con todos los controles de calidad intactos y de fábrica. ¿...?(¿..que me habría dado antes?)
    Después de una paciente espera el empleado llegó con el recambio.
    Desembalé el, a esta altura del relato; "esperpento"; y lo conecté a la corriente eléctrica. .. ahora sí me respondió el pitido satisfecho de su comando electrónico.
    Cómo la recomendación era no "arrancarlo" hasta que pasaran al menos dos o tres horas; y ante la constatación de que venía en caja; absolutamente cerrada, decidimos que no podríamos tener tanta mala suerte(que anduviera mal) y despedimos al conductor de la camioneta(que se llevaba de paso el descompuesto) luego de darle una generosa propina.
    El "elemento del confort moderno" nos esperaba hierático cuando volvimos del supermercado.
    Con la esperanza del clima instantáneo encendimos el susodicho y un ruido traqueteante percutió nuestros tímpanos mientras elevábamos la voz para poder comunicarnos.
    ¡Ahhhhhh! ..pero al menos este: enfriaba. Nos acostamos con la sensación de que la cama tenía un V8 de 160 caballos bajo el colchón(que no era yo para desgracia de la dama); pero.. ¡Frescos!. Por supuesto que nos dormimos arrullados por el trrnnnntrrrnnnnnnnn del compresor y un indistinguible tracatractrrrrr producto de su propia vibración que me avisaba de un rotor desequilibrado dinámicamente, mientras me desequilibraba psicológicamente.
    Como el artefacto andaba y nuestros oídos y paciencias soportaban los ruidos decidimos probarlo un par de dias antes de llamar al negocio nuevamente.
    El día dos de Julio el ocupante del departamento del piso inferior se apareció sorpresivamente reclamando que nuestras actividades "industriales" no lo dejaban dormir.
    Ante la caracterización de nuestra "trabajo físico" como tal actividad lo miramos interrogativamente; ante lo cual explicó que el ruido y la vibración que sentía en horas nocturnas se asemejaba mucho a la de una máquina tejedora con la cual había comenzado su fábrica textil hacía veinte años.
    Lo hicimos pasar y le dimos una muestra auditiva del "Confort Premier"; luego de reirnos un rato nos tomamos un whisky y nos despedimos como grandes amigos, prometiéndole que solucionaríamos el asunto a la brevedad .
    Hoy Lunes 3 de Julio busqué en el servicio Web de "Premiermundo.com" sus soportes técnicos en Venezuela.
    Conseguí de Caracas; una ciudad de cuatro millones de personas; un solo representante; supuse que sería el importador y supérstite comercial de la compañía.
    Cuando llamé, logré; después de escuchar una discusión de quince minutos entre lo que supuse que era una clienta insatisfecha y un "serviceman" elusivo, que el mismo personaje escuchara; a través del teléfono; mi reclamo; y el "ruido espantoso" de este "ubicuo ejemplo del confort" "Mundo Premier".
    Me sugirió que yo debía alcanzarle el equipo para que lo revisara.
    Cuando le sugerí que se "fuera al Japón"; que era donde; según la propaganda; diseñaron esta maravilla. el me respondió que la garantía no era domiciliaria(advierto que este es el tercer equipo que me cambian en una semana con lo cual dificilmente puedan argumentar mal uso ante la oficina de protección al consumidor a la que pienso concurrir con mi denuncia).
    Me comuniqué nuevamente con el negocio explicándole la situación a la dueña del mismo, quien; muy amablemente; me prometió que ella se pondría en contacto con el importador para decidir "que solución me daban".
    Ya es de noche, ha trancurrido una semana desde que compré el "bendito Aparato" y deberé dormir con el aire apagado(eso sí: en silencio).
    Mientras tanto; Premier, sus representantes, sus técnicos y sus vendedores arrastran una marca, una industria y el trabajo de obreros latinoamericanos " por el piso".
    Ese mismo día a las 9 y 45 Pm esta historia fue enviada a la casilla de correo electrónico "info@premiermundo.com" en una especie de ruego posmoderno a un dios electrónico y todopoderoso.
    El martes cuatro de julio nos despertamos temprano; un sol apagado por el cielo nuboso; que hace del clima una delicia; nos levantó el ánimo; pero una mirada al "aire paralítico" nos sumió en la desesperación de los que suponen al mundo paraíso de la tecnología y caen en la realidad del valle de lágrimas de las "atenciones al cliente".
    Estabamos observando por TV los prolegómenos de la firma del acuerdo por el cual este país se convertía en el quinto socio pleno del "Mercosur" cuando el repiqueteo del teléfono nos obligó a atenderlo.
    Una voz cálida me informó que la casa central de su compañia le había remitido el e-mail que yo había mandado el día anterior y a continuación desgranó en un discurso "marquetinero" las superlativas bondades del producto del cual me quejaba; finalizando con la afirmación " hemos vendido veinte mil equipos y sólo hemos tenido problemas con el uno por ciento". "El uno por ciento" remarcó como si esa afirmación fuera el primer mandamiento de un Moisés transistorizado. Para proseguir explicando que la mano de obra no era de latinoamérica"esto lo dijo con voz de asco" sino de la China; Hong Kong para ser más exactos; y que el equipo era totalmente importado.
    "Pobres chinos" con defensores así no deberían quejarse de los detractores de su "industria berreta".
    Antes de contestarle me sentí reconfortado; por lo menos otros doscientos "Cristos" me acompañaban en este calvario sudorífico; aunque yo les ganaba tres a uno en los penales.
    -¿..discúlpeme señora como se llama usted?
    -Jaki .. ¿ahhh usted es argentino? yo también aunque hace años que vivo aquí.-
    -Bien Jaki lo que usted me dice no debería tranquilizarla; cuando lleguen al millón de equipos habrán dejado en el camino confundidos, maltratados y furiosos a ¡diez mil clientes! y habrán perdido de acuerdo a las estadísticas de ventas ¡Cien mil clientes!-.
    -Le aviso señor.. ¿Cómo se llama usted?-
    ..
    -Le aviso Sergio que estos equipos tiene un exhaustivo control de calidad y han sido diseñados en Japón-
    -Jaky no me quejo de los controles de calidad ni del diseño; de eso se debe quejar usted que es la que lidia con los problemas. Me quejo del misérrimo servicio técnico que tienen-.
    -Es que usted procedió incorrectamente; debería haber llamado a nuestro centro de servicios al cliente en Maracaibo, En Caracas sólo tenemos servicios autorizados-.
    -¿...? ¿Maracaibo? Pero si eso está como a mil kilómetros-.
    Ante el surrealismo de esta conversación que no me conducía a ningún lado le comenté que hablaría con la parte vendedora y volvería a llamarla.
    Repitiéndome por enésima vez las bondades de los productos de "Mundo Premiun" me dió el teléfono de su oficina y su celular. Cuando estaba a punto de colgar me solicitó mi e-mail y el nombre, la dirección, y teléfono del negocio de electrodomésticos; que procedí a leerle de la boleta de compra respectiva.
    No había pasado ni diez minutos cuando me llamó la dueña del negocio y me dijo que en treinta minutos me mandaría un nuevo equipo; pero que yo debería pagar el transporte de ida y vuelta.
    Ante mi muda respuesta, agregó "vale cuarenta mil bolívares". "El mal menor", como decía Aristóteles, se vino a mi mente y me sorprendí respondiendo afirmativamente mientras mi Marat interior pergueñaba irrealizables homicidios.
    Cuando el sol se acercaba a su cenit el zumbido del "portero eléctrico" me avisó de la llegada del nuevo equipo.
    Ante mi demudada mirada un desconocido conductor entró al departamento empujando un equipo que rodaba sobre sus rueditas.
    Ahora me traían una máquina sin caja ni nada; una especie de artefacto expósito.
    No terminó de saludarme y ya enchufaba el artefacto en un tomacorriente cercano y al silbido casi inaudible del aire en la reja de salida se le unió el suave ronroneo del silencioso compresor.
    Un instante después el aire frío aliviaba mis resquemores.
    "El que se quema con leche ve una vaca y llora". Este refrán universal me vino a la mente mientras revisaba concienzudamente el "aparato".
    Al pasar mi mano por el frente la asperezas despertaron mi visión y los raspones surgieron nítidos opacando la brillante superficie.
    Después fueron las huellas digitales, los pegotes, las rueditas mugrientas, el cable envuelto en cinta aisladora, sucio con pelos y pelusas etc. etc. etc.
    -Este equipo es usado; no le parece-.Interrogué al transportista que indiferente observaba mis manipulaciones.
    -ehhh.. ¡Ejemm! Sí ¿..parece no?-. Balbuceó con cara de circunstancias y" yo no fui".
    Volví a llamar a la vendedora que ante mi indignación me dijo que "esas pequeñas rayaduritas"(sic) se debían a que era un equipo de exhibición al que la gente manipula sin cuidado; que la habían llamado desde el centro de atención al cliente de Premier para reclamarle el pronto recambio del equipo.
    Como no tenían más equipos en caja cerrada habían probado el de exhibición exhaustivamente y andaba muy bien.
    Ante tal explicación decidí llamar al centro de atención al cliente
    me atendió la señora Jacki a la que me quejé de que el equipo de recambio parecía usado.
    -¡No puede ser! ¡Qué cosa bárbara! No se preocupe; déjelo así que nosotros se lo cambiaremos por uno nuevo y en caja-.
    "Quién pisa un clavo desconfía hasta de la cola de pegar" Este refrán de mi viejo me vino a la memoria instantaneamente. Si ya me habían mandado tres en caja cerrada con los resultados conocidos; pensé.
    -Bien señora y cuando efectivizaría el cambio-. Pregunté sin aparecer ansioso.-Porque tengo el equipo que me han enviado, aquí; al menos aparenta andar bien y no se que hacer, si mandarlo de vuelta o conformarme aunque esté un poco rayado y sucio-.
    -Bueno señor- respondió-se lo podríamos estar cambiando para dentro de diez días, que es cuando el camión de reparto estaría disponible en la zona de Caracas.-
    El condicional "podríamos" enfrió mi entusiasmo. Mi Aristóteles interno me sugería fervorosamente aceptar "el mal menor"; y eso es lo que hice. Le di las gracias agregando sibilinamente "Por nada" y tomando nota del "a sus órdenes", por cualquier eventualidad.
    Pagué el importe del viaje en dólares; no me quedaban Bolívares; y con dieciséis menos en la billetera; perdí un minuto en consolarme:"Al menos este equipo andaba bien, unos rayoncitos que tarde o temprano aparecerían no tenían ninguna importancia etc. etc. etc".
    Mientras disfruto los 23 grados "Premier"( la temperatura exterior es de 31) y mi autoestima se eleva, me acuerdo de Heráclito(nuevamente):

    "No conocerían el nombre del bien si su opuesto no existiera"

    Satisfecho de que mi "sufrimiento me deparara un goce más completo del "artefacto"; y acunado por el ronroneo del mismo continúo la carta de protesta con el ánimo templado.

    -La heladera que compramos junto con el aire acondicionado dejó de enfriar y lo que está en el freezer empieza a descongelarse.-
    El reclamo que penetra en mi "Mundo feliz" me hace acordar nuevamente de Heráclito:

    Todo cambia; nada es permanente

    En silencio; "escucho" a mi yo sarcástico y "Parmenidiano" aseverar:

    lo que es verdadero, no cambia, es eterno y único

    -¡Andate a la p... que te parió!-.
     
    #1
    Última modificación: 14 de Marzo de 2021
    A Luciana Rubio le gusta esto.
  2. Luciana Rubio

    Luciana Rubio Poeta que considera el portal su segunda casa

    Se incorporó:
    24 de Marzo de 2008
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    Mujer
    Excelente cuento. Un gusto leerte.
     
    #2

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