1. Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Cerrar notificación

El beso de Morfeo

Tema en 'Prosa: Amor' comenzado por Flor de agosto, 3 de Septiembre de 2019. Respuestas: 0 | Visitas: 1187

  1. Flor de agosto

    Flor de agosto Poeta que considera el portal su segunda casa

    Se incorporó:
    24 de Mayo de 2009
    Mensajes:
    2.839
    Me gusta recibidos:
    764
    Se encontraron en silencio y no fue casualidad. Por lo menos de su parte, fue algo premeditado. Ella inocente e ignorante a los estragos que la vida deja en personas como tal. Que con el tiempo desarrollan la capacidad de saber manipular con palabras o con gestos. Muy sutil, muy siniestro.

    Es curioso... el tiempo y la gran dedicación que una persona emplea en buscar la mejor manera de convertirse en un fraude o en muchas personalidades confundiendo al mundo entero.

    En esta ocasión se encuentran después de mucha insistencia de parte del depravado. Su debilidad la vio. Ella buscaba algo profundo y un sentir como de otro mundo. Algo trascendental. No quería ver a Dios. No pienses que era eso. Era más grande, era inmenso. Ella quería conocer al universo. Fluir a través de sus sentidos.

    Y comenzó con un beso.

    Todavía preguntamos... ¿como fue que él supo eso? Que con tan solo ese beso ella abriría un portal, que en realidad fue mortal. Porque al final ella muere. Su viaje a ese universo probó ser su final. ¿Que pasó en ese espacio de tiempo? En el momento del beso. Cuando accedió a la petición de ese fulano de tal. Y ¿quien era ese fulano? No era nadie. Ahora sabemos que no lo conocíamos. Pensábamos que lo conocíamos, pero resultó no ser así. Ese desconocido supo hacerse amigo de ese ser inocente que no confiaba en la gente. Antes de darse cuenta ya había perdido la mente por ese falso indecente. El encontró de alguna manera curiosa tejer una red de telarañas quizás por aburrimiento o podían ser artimañas para pasar bien el tiempo. Buscó las finas palabras y el más preciso momento... allí encontró vulnerabilidad. Y con toda frialdad le pidió probar un beso...

    Ella no supo cómo, pero el beso fue un terremoto y un tsunami al mismo tiempo aún en estos momento aunque ha pasado tanto tiempo que se disparó tal evento, es en verdad un misterio. Confusión, choque, desconcierto, sorpresa. Terror de algo tan poderoso. Una gran fuerza invisible. Una ley del universo. Tiene que haber un algoritmo que descifre ese suceso de abrir un campo de energía a través de sólo un beso que no fue planificado pero al parecer sincronizado.

    Ella me siguió contando. La circunstancia fue rara, pues a ella no le interesaba, y hasta feo lo encontraba.

    Era una noche letárgica, de una energía baja. Como si nada pasara, el tiempo redujo la velocidad. No paró el tiempo, no es eso. Fue como cámara lenta. Pero curiosa observación, ella logró ser testigo, se removió de su cuerpo y observó en ralentí para magnificar la experiencia. Me relató que al mirar a esos dos seres humanos en ese acto pasional, cuando sus labios tocaron, fue una ola de energía que tomó posesión automática de esos cuerpos. En la mente femenina fue conexión instantánea, algo etéreo, de otro mundo; algo trascendental. En la mente masculina fue un trofeo para ella. Convirtiéndose en Morfeo haciendo sueños realidad y ayudándola a escapar de la vida que ella tenía pero que en realidad era la que él quería y que siempre iba a envidiar. “Si no puedo alcanzar esa vida, ¿a ver a quien puedo arruinar?” El fulano se decía.

    La relación ideal... y así pasaban los días, con encuentros, coincidencias, desesperadas ausencias, soledad en muchedumbre y la pasión de costumbre. Eso fue hasta esa noche cuando por fin decidió el mal parido depravado, matarla sin compasión. Una confesión grave, fue verdadera traición. Confeso llevaba tiempo coqueteando con el diablo, jugando a hacerse el difícil pero en el fondo deseando tocar un cuerpo prohibido sabiendo que iba flaqueando, pero seguía ignorando. Se convirtió en dos personas, la que la seguía amando y la que seguía jugando. Sus palabras eran flechas, una emboscada, una balasera. Confesó para absolverse.

    La sangre empezó a fluir como un rio fuera de cauce. El corazón de la chica, quien me contó la injusticia, sangró hasta más no poder. Se vació la vasija. Fue como pestañear y no entender lo pasado. El universo bromeaba con la actriz de este canto. Ella no era bromista y no entendió lo jocoso de la acción en escenario. No entendió la razón y tampoco la intención. ¿Será que hay una lección? Tomó un suspiro y murió. La acta de defunción dicta que murió de un ataque al corazón. Y que pasó con fulano? ¿El tipo que la mató? Dicen que todavía sigue regalando besos y que en algún lugar del mundo hay otra víctima en los brazos de Morfeo.
     
    #1

Comparte esta página