El brillo del huerto

Fruta fresca que florece
protegida en marquesina,
mermelada dulce y fina
para mi niño que crece.

En el huerto de mi casa,
haré columpios y lagos,
mientras que mi niño pasa
voy a colorearle prados.

Cuando venga la tormenta,
lo arrullaré en mi regazo
y con galletas de menta
construiremos un palacio.

Plantaremos las mimosas
para desterrar los miedos
y vestiremos las rosas
con el color de los sueños.

El tiempo seguirá corriendo,
mi niño será fuerte y grande,
el huerto estará floreciendo
aún cuando caiga la tarde.

Y cuando llegue el momento,
de recoger las andanzas,
concluiremos este cuento,
con la flor de la esperanza