El cielo entero penetrado

La inerte sombra del agua, los puntos
contigo en el arma, pestilentes y bubónicos
desprendiéndote de ti mismo subiendo
y raptando esta voz, este sonido.

Yo pude persistir cuando mate a este
diablillo, la entera pobreza de un rio
colosal que no extiende; cuando esta dormido
cuando me siento contigo vivo.

Pero, ¿Dónde esta el ruido? y, ¿Dónde esta la prenda que dejaste?
me marche poco a poco por la ciudad de las sombras
y fui describiendo esta ronda de besos
en uno solo como lo hace cada poeta.

Repartí tan doloroso sexo ahora que estoy
a tu lado, desnutrí el océano de su lindo safari
para ti, sin preámbulo o contento
para así marchar a toda velocidad.

Enjaule de ti el sexo
desprendí de ti mi cuerpo
comprendí que es tu deseo
y al marcharme deje esta triste nota.

 

Un gusto leerte...