El cristal y el alma

¡Qué bueno que el espejo estaba en mi rostro!
Ahí,
donde la sonrisa de mis labios
fueron el reflejo de la mirada profunda
de tu tierna mirada en mí.

¡Me encanta ser tu espejo!
¡Me gusta decirte que cada día estás más linda!
y que puedes quebrarme
cuando atenta te miras en la imagen
que en ti proyecto.

¡Me desbordo y me desdoblo cuando te acercas
a este espejo que te ama!
Y sin negarte que la imagen de tu cuerpo
cambie con los años,
la verdadera esencia de tu ser permanece en el cristal
de mi esperanza
porque todos los días
eres más bonita.




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¡Qué bueno que el espejo estaba en mi rostro!
Ahí,
donde la sonrisa de mis labios
fueron el reflejo de la mirada profunda
de tu tierna mirada en mí.

¡Me encanta ser tu espejo!
¡Me gusta decirte que cada día estás más linda!
y que puedes quebrarme
cuando atenta te miras en la imagen
que en ti proyecto.

¡Me desbordo y me desdoblo cuando te acercas
a este espejo que te ama!
Y sin negarte que la imagen de tu cuerpo
cambie con los años,
la verdadera esencia de tu ser permanece en el cristal
de mi esperanza
porque todos los días
eres más bonita.


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El juego de los espejos se vuelve bello, bellísimo, cuando se refleja la imagen añorada. Ojos de flor y pétalitos del alma:::gafas1:::.

Según pasan los años, vamos valorando cada vez más la belleza interna. La que no es efímera.


Qué alegría reencotrarte en esta pieza límpida, vital, amorosamente tallada.


Mis mejores deseos y las estrellas más luminosas para vos y tu poema.


Un abrazo desde Buenos Aires.
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Muy románticos y delicados versos escritos al amor, dulces y tiernos que dejan un sabor especial a poesía. Ha sido un placer pasar por tus letras, mi querido amigo. Te felicito y dejo un fuerte abrazo.