El demonio ciego

Risas escandalosas ya han cubierto el cuarto oscuro,
¿Puedes escucharlas como yo lo hago?, el frió me consumió
Mi corazón ya no puede sangrar más porque se ha congelado.

No tengo humanidad alguna, no tengo sensibilizad apostada
solo alas rotas y pesadas, ¿Sufrir?, siempre lo he hecho
miles de años más son ya poco para mi... sin pupilas.

Ya no puedo mirar a la Luna de la misma manera que solía observarla,
tal vez tenga cuerpo humano pero nosotros sabemos mimetizar a la perfección.
Silenciosa agonía...
Silencioso sangrar...

Y ahora a callar.

 

en el silencio tambien se grita,
tambien se aturde...


interesante poema...​