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El felpudo

Tema en 'Prosa: Generales' comenzado por jmacgar, 21 de Julio de 2012. Respuestas: 1 | Visitas: 723

  1. jmacgar

    jmacgar Poeta veterano en el portal

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    El felpudo​
    Permaneció en la cama sin dormir oyendo ese sonido enloquecedor que todas las noches le robaba el sueño; a las 02,00 horas se puso las pantuflas y se levantó para llevar a cabo su plan de escaparse definitivamente del indeseable que roncaba sonoramente a su lado; ¡Esta iba a ser la noche!; ya estaba bien de aguantar tanto trato degradante; no soportaba mas oírle decir "¡cállate!, tu eres mi felpudo, ¿sabes?, ¡mi felpudo!, y los felpudos no hablan". Si, sí que lo era; era la cocinera de sus guisos, la lavandera que incluso le lavaba ¡a mano! los calzoncillos, la sirvienta que le tenía la casa como los chorros del oro (¡hay que ver como brillaban esos suelos de "dar cera pulir cera" de rodillas!), y hasta la muñeca hinchable de sus desahogos; de tanto repetírselo había terminado por asumir que era, efectivamente, su felpudo. Pero ¡ya estaba bien, hombre por dios!; se acercó al armario, sacó el elegante abrigo que le había regalado en aquellos lejanos tiempos en los que aún se gastaba el dinero con ella y se lo puso sobre el pijama -no había tiempo de estarse vistiendo, ni quería llevarse nada de aquella casa que había terminado siendo su mazmorra -, luego metió en una bolsa grande unas botas de tacón alto, una bufanda y un sombrero que apenas había usado; era su forma de sentirse otra. A continuación se dispuso a deslizarse con sigilo y rapidez hacia la mesilla de noche donde él dejaba las llaves del coche y su cartera, pero, hete aquí que esa maniática afición que tenía de "dar cera, pulir cera" por todos los suelos del maldito piso fue su perdición pues, en vez de deslizarse con sigilo, la hizo patinar con estrépito con tan mala fortuna que fue a dar con la sien en el filo de la mesilla de noche quedando desparramada en el suelo cuan larga era, sangrando y sin sentido, justo por el lado de la cama por donde se levantaría su tirano ; la bestezuela durmiente tenía el sueño tan duro que ni se enteró de tan tremendo estampido, sólo abrió los ojos al sonar el despertador, a las 06,30 horas. Se incorporó en la cama y al levantarse para salir disparado al baño, puso los pies sobre ella que yacía aun allí, boca abajo, con el abrigo puesto.
    -¡Pero bueno, cariño, -exclamó- no hace falta que te tomes tan al pié de la letra lo de que eres mi felpudo; ¡anda, levántate y vete preparándome el café!
    Y , pasando sobre ella, se fue directamente a levantar la tapa del inodoro para hacer su primera micción.
     
    #1
    Última modificación: 21 de Julio de 2012
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  2. Eratalia

    Eratalia Con rimas y a lo loco

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    Pues no sé si es cómico, trágico, o viceversa. La historia es trágica, qué duda cabe, pero la narración...
    Bueno, otro que sale del pozo a los cinco años, a ver qué pasa.
    Abrazos.
     
    #2
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