El hombre, el fantasma y el secreto

El secreto se mantiene irrisorio
razones de vital alerta,
guarda el hombre bajo sus brazos,
hechas tierra y mordedura,
éxtasis,
y otras cosas.
No quiere quitarse la máscara,
no le preguntes de adjetivos,
otra vez se va,
un entorno confuso y sus alrededores muertos,
ya casi sin acciones y sin deudas de vida,
los colores se colocan de manera descendente,
entre el tallo y la hoja
entre la raíz y el tronco,
descompuestas e irritadas,
el futuro inmediatamente dudoso,
y el menor movimiento de los pies, causaría muerte,
se vuelve sujeción,
el hombre se agranda dentro de sus secretos,
hasta parecer un fantasma invencible.​

 

Muy buena poesía, el cierre excelente, mucha realidad contundente.

Saludos
Daniel