El infiel

Mientras decidimos
cuál de los dos es la mala influencia,
el pervertido
el de la mente sucia,
corrómpeme tú.

No hagas caso a mis palabras
sabes que no soy inmune a tus encantos,
ni siquiera ando cerca de eso
porque mi fuerza de voluntad
nunca dio para tanto.

Tampoco hago caso a lo que dices,
sabes mejor que yo
que me seguirás tentando
porque te encanta ser
la razón por la que me siento infiel.

Y quién no va a ser infiel
si el sólo ver tu piel
en ropa interior
levanta hasta a mis zapatos.

Tú pruébate cualquier sostén
y pide mi opinión
que con gusto la tienes,
hazte la inocente
que yo sé muy bien
quién corrompe a quién,
mira a este anciano
que corromperte no puede.

Aquí los dos estamos claros
de que la rutina y la pasión son dos extraños
que no pueden estar en la misma habitación,
voy a inventarte un nombre
que combine con pecar,
así que mucho gusto
yo soy un arcángel
y tú la hija del mar.

Mientras decidimos
quién es la mala influencia..
corrómpeme tú.

 

Realidad como en la vida misma. Buenos versos amigo Roberto. Un abrazo

 

Siempre se trata de dos...
Pero que la culpa sea del otro, suena mejor

Saludos.

 

Simplemente genial!!!

 

Gracias por tu visita Halcón. Un placer recibirte por acá.

 

Es mejor ser el inocente. Un placer recibirte por acá.

 

Muchas gracias Miguel_Angel. Un placer recibirte por acá.

 

qué solicitud tan extraña y que difícil de complacer no?, saludos amigo

 

No, Marianne, ni es extraña ni tan difícil de complacer. Un placer recibirte por acá.

 

Puestos a ser infieles seamoslo entre nosotros, nos engañamos uno al otro con nosotros mismos. Como siempre bello poema en una hermosa escritura amigo Robsalz. Un abrazo. Paco.

 

Muchas gracias por tu visita Paco. Un placer recibirte por acá.