El látigo de la indiferencia

Al final de esta probre vida,
nunca me tendiste tu mano,
siempre fui yo quien buscó algun pretexto para prentender
buscar algo dentro de ti,
quizas amor,
quizas solo pasión,
y que sabía yo?
tan solo te dije que no te fueras
y te quitaste de mi vista como una fiera,
tan solo tú y tú.

Mis ojos podrían ver a traves de ti,
cualquier verdad,
yo podía calcular el rumbo que tomaban cada una de tus palabras,
pero al final de cuentas eras tú quien no quería
el roce de nuestra piel,
eras tu la que inconcientemente me rechazaba,
desde Caracas,
hasta Playa Doradas,
y mirenme ahí,
no queriendo despertar de este sueño nunca,
y que sueño?
el de tus pupilas color cielo
y el de tus labios
rojos tornados al anaranjado...

Me amas?
o me quieres tan solo un poco?
indeciso veo aquel futuro que sale de tus pensamientos,
no muy claro los detellos de tus te quiero,
pero si algo de sombra en aquellas caricias tuyas,
muy sin sentimiento.

Dime una palabra
para escribir un único texto de revolución,
algo nuevo,
algo que nunca se haya hecho,
pero no me quites del cielo
los nuevos rumbos y el imcomparable ritmo de tu presencia,
pues nadie ha dicho
como te deben amar,
nadie ha dicho como las palabras se deben formar,
nadie lo ha dicho...

No me propongo morir en el intento,
porque yo ya estoy muerto,
pero si te prometo ir hasta la luna
y bajar una estrella,
hasta la mas pequeña que fuera
y gritarte que no te vallas,
pero si no volteas,
tendré que desaparecer,
y dejar que me consuma el silencio....

 

Asi sucede,damos y damos y al final,nada recibimos, asi es esto. Saludos te dejo repu

 

gracias!!! era una nota dedicada, al final creo que ni la comprendió.. en fin esperaremos!!

 

Hermoso, admirable poesía preciosa.

 

Bella perla de tu buen versar mi querido amigo. Me gustó. Un placer leerte. Besos con cariño.

 

gracias por lo de perlar, gracias!