El mal habito colectivo de amar

Y vienes tú,
con tu argumento de migraña,
con tu distancia de indiferencias,
con tus honestas patrañas,
sobre una calle de ausencias,
entre una trampa de corazones,
entre palabras sin expresiones
y rostros sin emociones,
en un cuarto con salidas
por todas partes
y una esperanza fallida
que trae la tarde.
Y vienes tú,
con toda tu historia conocida,
a volver hablarme de amor.
Y vuelvo yo,
con la más pura condescendencia,
a dejarte mi corazón.

 

Estamos atrapados en el subconsciente colectivo, estoy convecido de que no nacemos predispuestos a amar, es un proceso de formación el que nos mete la idea en la cabeza, es lo que hay, buen poema Mario. Un abrazo. Paco.

 

Letras magistrales de la soberbia poesía emocionante.