El mendigo de la esquina

No tengo dinero, ni blanca, ni halagos...
tan sólo la ilusión loca de un final desesperado...
me pierdo entre las calles, 4 cubatas y dos gramos....
los gatos me susurran que deje de imitarlos...
sólo soy un ser cautivo, de las miserias y los llantos...
sólo con un vil propósito, la supervivencia de mi canto...
no canto por mi agonía,
no canto por mi quebranto,
canto por mis hermanos perdidos, entre las nieblas del asfalto....
entre las nieblas del asfalto....
y entre tanto amigo muerto, entre tanto, entre tanto....
sólo queda la sustancia de los cigarrillos ya fumados....

 

Muy bueno. Tu poesía tiene música de fondo. Te has dado cuenta no?
Paloma.