El miedo, mal consejero

EL MIEDO, MAL CONSEJERO

Mal consejero es el miedo
cuando la maldad desconoces,
no creas que reconoces
todo cuanto esconde un velo,
pues aunque deje ver el cielo
solo reconocerás sus voces,
comentándote las coces
que lanzan con desconsuelo,
aquellos que tocaron suelo
después de ser altavoces.

El miedo es la incertidumbre
hacia lo desconocido,
al saltarnos la costumbre
de antes que azuzar la lumbre,
debemos haberla encendido;
y es que: ¡Nadie llegara a la cumbre
sin de cero haber partido!

Nunca líes con un alambre
de los demás sus ideas,
o puede que pronto veas
como se apodera el hambre,
del corazón de los hombres,
pues, y aunque tu no lo creas
todo el destino esta en sobres,
para que Caronte nos cobre:
¡Nuestro peaje, y esquelas
según aparecen los nombres!

Joanmoypra/junio/2013
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