El miedo

¿ Dónde se esconde el miedo
que nunca calla?,
que susurra al oído,
que te amedrenta.
¿ Dónde deja su huella
que siempre marca?
que recuerda los rastros
de la nostalgia…

¿ Dónde se va la vida?,
le dice al alma,
y te muestra el reloj
que te quita ganas
¿ Dónde se esconde el miedo
y qué es lo que trama?,
con sus sucias argucias
que todo empañan.

Y se afana en dejarte
con mala cara,
y te dice de cuentos
que mal acaban.
¿ Dónde se esconde el miedo
que nunca calla?
¿ Por qué no esconde algún día
su mala fama?

 

Dice mi gran amigo Jorge Salvador, que cada vez entiende menos a la raza humana. Yo no creo que, aparte de los estudiosos que quieren valerse de nuestras debilidades, haya nadie que la entienda.
Dicen que para ejemplo sirve un botón, y me vas a permitir que ese botón de muestra, lo compare con tu poema.
Encuentro en él (mejoras aparte) una estructura fuera de lo que estoy acostumbrado a ver aquí, que dicho sea de paso, si por cada soneto que se escribe se reventara un huevo, desaparecerían las tan preciadas tortillas.
Bueno, sigo. Me gusta la estructura, la entonación que le das, el tema, y sobre todo, la sencillez, que es lo que más aprecio de un escrito, y, aunque a mí modo de ver necesita alguna corrección, no veo justo que se hunda en el fondo de este mar de letras, sin ni siquiera un comentario.
Hace tiempo que no comulgo con una gran mayoría, ni ella conmigo;
en verdad es por cosas como esta, (dejar caer un poema que NO SE MERECE CAER) sin ni siquiera hacerle una observación.

Tienes mi "me gusta", y por supuesto, mi felicitación.

Un abrazo.

 

De estructura no entiendo mucho pero el poema es bueno. El miedo nunca calla, es cierto y hay tantos miedos escondidos en los burdeles de la vida que asfixian. Saludos cordiales, compañero.

 

Precioso e inmaculado poema, Miguel, el miedo anda por ahí; hoy un morito se llevo mi celular con veinte poemas y algo más, ¿voy a dejar que me coma el miedo y la angustia o voy a tirar pa lante?, voy a tirar pa lante y al miedo que se lo lleve el viento, una cosa si está clara; cuando venga a buscarme la muerte me llevará, pero no hay miedo mientras la espero; si acaso algo de sufrimiento, pero eso queda marcado, como una herida, el miedo se va con viento fresco hasta con ella, ¡valor carajo!, con él nos iría mejor "así debas sufrir violenta muerte"(es de un poema mío).

Un inmenso placer la lectura de tu magnífico poema, saludos cordiales.

Alberto, desde la calle.