El mundo anoréxico

Parpadeo al sol

rayo de luna,

apuñala el arma de incandescente figura,

¿Qué no lo ve?

Semejante locura,

transparente es a ojos ciegos

y a los sanos ella cura.

¿Cómo no lo ve?

Pesado es su llegar

mas no repara en su silencio

y da vida al espejo que hila de hierro

y refleja como el viento

un cuento al azar.

¿Realmente no lo ve?

Profundo, pesado, triste, claro que lo ve.

Mas no retumba escalofríos su sentir,

ni futuro tiene al parecer.

Ella lava sus manos en las cenizas

de aquella vida que marca su despedida,

sin nadie entender su existir;

del interior es su provenir y acechando

a su alrededor hambriento y sin corazón,

al que al parecer dos caminos ha de tener,

cuando realmente no lo vio,

tomo un paso por delante.

Ella siempre lo supo, siempre lo vio,

atrapado en su mente estaba,

bajo el mando de su más recóndito secreto,

con lo que el espejo a ella golpeaba.

Al parpadeo de sol, rayo de luna, de incandescente figura.

Falso reflejo murió,

en silencio e indiscreto.
​

 

Creo que puede llegar a ser un gran escrito, si pulieras un poco el poema, más fluido, sin tanto infinitivo verbo, más entendible... Posee bellas metáforas, imágenes... En fin, me gustó.

Saludos.

 

La identificación de ser, tamizada por la idea, de una imagen propia pero que saborea extraña.

Saludos.