El otoño de las avispas

Desde aquel otoño de las avispas
no ha dejado de llover mierda
y aquí seguimos, detrás de la vida,
mirando a través de un cristal
cada vez más borroso.
A veces se cruza una lágrima,
otras el silencio y esa angustia en el pecho
que no cesa,no cesa...
No sé, compañero,yo creo que uno
se va rompiendo poco a poco
y cuando te quieres dar cuenta
poco importa dónde carajos
se formó la primera grieta.

Rosario Martín

 

¡Qué bueno el poema, y qué buenísimos los versos finales! La verdad no se puede añadir mucho más sobre el fondo del poema, así es, cuando uno se da cuenta en lo que se ha convertido, ¿qué importa cómo empezó todo?, seguramente todo empieza el día que naces. Magnífico, Rosario. Mis aplausos y un beso, amiga.

 

Es pequeño tu poema pero muy intenso, como esas picaduras que marcan el alma y arrastran consigo un dolor que se renueva al frotarlas.

Besotes compi

Palmira

 

Dice una copla (Creo que es de Quintero)
"El día que nací yo,
qué planeta reinaría
por donde quiera que voy,
qué mala estrella me guía..."
Mentiría si digo que me guía una mala estrella
aunque ambas somos miopes y así nos va...
Lo bueno de una mala racha es que
todo lo regular parece estupendo
y como dice Serrat:
"De vez en cuando la vida
toma conmigo café
y está tan bonita que
da gusto verla..."
¿Te pongo un café?
Muchas gracias, compi,un beso.

 

Esto es totalmente cierto, aunque generalmente sea circunstancial y ese ímpetu vital que nos invade, remedie al menos momentáneamente tal desastre,

Un gusto haber leído tu interesante poema, Rosario.

Un abrazo.

 

Muy bello, tiene mucha fuerza y unos hermosos y desgarradores versos finales. Me ha gustado sin remedio amiga Rosario. Abrazote vuela. Paco.

 

Gracias por tu Luz, compañero,un abrazo grande...

 

Profundas letras intensas y maravillosas de una composición magnífica.
Jorge Lemoine y Bosshardt, "Estrella Máxima" de Mundo Poesía.

 

A veces me pregunto, también hoy,si mis poemas están a la altura
de comentarios como el tuyo ¡ Qué bárbaro !
Gracias, compi,me voy emocionada y me gusta.
Un beso

 

Pues no queda otra que seguir, llueva, nieve o truene. Por aquí también llueve y mucho, pero hay un refrán muy gallego que creo q ya mencione alguna vez,
"nunca choveu que non escampara"

Que siempre para, siempre. A veces deja secuelas y otras sales fortalecido,
esto ultimo es posible que sólo se diga para consolarnos jsja,
es que supongo que en el fondo somos muy optimistas o necesitamos serlo, y a falta de un dios, pues tendremos que tener algo a lo que agarrarse, aunque solo sea al refranero.

Muy bueno.

Me encanto el titulo, y para un libro es genial.

Un besito.

 

¡¡Magníficos versos Rosario!!El otoño como punto de inflexión, un cambio irremediable a peor . A veces un solo hecho cambia nuestras vidas y como las picadas de avispas es algo inesperado que nos desarma por dentro.
Abrazos, muchos.......................................como chiquicientos

 

Pero a pesar de los pesares,hay cachitos de vida que se salvan.
Agradezco muchísimo tu compañía, tu apoyo,gracias Luis.
Un abrazo

 

Gracias, amigo Paco,un abrazo grande

 

He descubierto, no hace mucho,que también mi paciencia tiene un límite,
pero, sí,no queda otra que seguir...aunque haya que cambiar de aires.
Gracias, compi,un abrazo interminable.

 

Quizás son esos cambios a peor los que nos animan a dar un giro
de una vez por todas.Estoy en ello...
No sabes cuanto agradezco tu cercanía, amiga,un abrazo inmenso.Gracias...

 

Muy buen poema, Rosario.
Gozoso poder encontrar poemas de esta calidad.
Aplausos y abrazos, poetisa.

 

Buen poema para mostrar una vida dura, cargada de penas y desencanto, donde lo mejor quizá sea el olvido.

Saludos

 

La vida, la jodida y maravillosa vida es lo que tiene, que viene sin manual de usuario.
Aún así, es extremadamente recomendable transitar entre sus obstáculos.

Gran poema, Rosario.
Gracias.

 

Por cierto, ¡la firma es genial!

"Saldrías a la calle
para comerte el mundo
y vas a la cocina
y te haces otro sándwich
y vuelves a internet.."

Rosario Martín

 

Es un poema de bella factura e interesante, me consta que escribes muy bien o al menos esa es mi humilde opinión de semiletrado, no me parece muy triste, pero lo idóneo sería estar dentro de ti para saberlo... podría ser existencialismo aún con ese poso de tristeza personal .

En cuanto a las particularidades de las que hablas no creo que sea momento para contarte las mías sino de acompañate para que esas murrias y esa melancolía que invaden tus momentos sean menos con un caluroso abrazo y un montón de mimos siquiera de estos de por Internet.

Pues lo dicho, abrazos de cariño y los mejores deseos para tu tiempo Rosario.

Jon ( sé que no te gustan las imágenes en los foros pero espero que imaginarnos un campo de margaritas te inspire un sentimiento agradable).

 

Te agradezco muchísimo el apoyo recibido, Luis,
es un honor.Un abrazo grande, amigo.

 

Así es, compañero,seguimos caminando...
Gracias por venir,saludos cordiales

 

La vida, si queremos vivirla,nos sorprenderá
en todos los sentidos.
Gracias, compañero,muchas gracias

 

Tienes razón, compañero,aunque lo escribí en un momento de bajón
no era la tristeza lo que más me embargaba, quizá aceptación, resignación...
La idea inicial era publicarlo en filosóficos
pero me despisté y lo hice aquí,no quise dar trabajo
a los moderadores para cosa tan simple.
Las imágenes, imaginadas,me encantan y la tuya es hermosa.
Gracias, Jon,por venir...Un abrazo

 

Perdona, compañero,me pasé sin querer tu comentario.
Gracias, Jorge,por tu apoyo...
Un abrazo y cuídate

 

Solo nos quedan los pedazos de vidrios rotos de la ventana del alma donde hasta las cascadas se han secado y el corazón es tan solo un recuerdo.¡Magnífico y certero poema! Un placer pasar por su maravillosa poesía, reciba mi más cordial saludo.

 

Malditas avispas; yo soy alérgico.
Me duele este poema, Rosario; y es porque lo escribiste con pelos, señales y cicatrices que no se dejan cicatrizar.
Siempre te digo que tus poemas son un flash que llega directo a la retina... y de ahí a la materia gris oscura que nos posee.
Sobran comentarios, pero me emocionó leer lo que escribiste... enorme poema.
No es que no tenga importancia la primera grieta, pero sin duda la última es la que más duele.
Besos, mi miope preferida... y ahora mismo te estoy viendo sentada en una piedra a la orilla del río.

 

Qué comentario más hermoso, compañero,un poema.
Gracias.Un cordialísimo saludo

 

Gracias, Alonso,con este poema se cierra una etapa de mi vida
pero tú sigues en ella y seguirás...Besos, querido amigo,desde las piedras...