El otro paso

Al hambre del suicida Al vencedor del aliento

cuyo maquillaje es un pedazo de Luna

regresando de un viaje de mariposas


Sorber todo lo que queda del último verso

rebotan tus ojos de insomnio en insomnio

como una picazón de ala de ave


Y te aligeras

como una cruz que flota en cada rezo

tu límite en el espejo es todos los sueños que puedes

cargar sin desfallecer en el aliento


entre la multitud


Deja al destino gotear en cada puerta

Esquiva al vendedor de destino rojo

para que tu cabello no se despinte

en el gran lago de las tragedias



Tus huesos

y la dirección de tus huesos dentro de tu cuerpo

de loco perdido

de manos de torbellino de vida

y de muerte también

cuando el labio no se deja ver fuera del pozo


y decides cruzar lejos de los semáforos

Y otro de tus pasos te pregunta la hora

y no sabes que decir...

 

Saludos Alde.