El sanatorio de los ojos rojos.

En ese lugar silente y perdido
descanso de miradas estruendosas
junta en la vista lo eterno y salido
vuelve el ciego con corridas ruidosas.

Buen espacio para aquellos que buscan
salidos del sueño sereno y abierto
lugar de agrias discusiones que ofuscan
y eternos domingos de dulce acierto.

El Sanatorio de los ojos rojos
palpa realidad en suave vida
en cuya noche cierran los cerrojos
un solo día de luz acogida.

Un lugar entre despertar molido
y dormir después en paz dolorosa
accidente en espectáculo olido
nunca vuelves con la voz temblorosa.

Si me sigues, en débil flema brusca
frágil amigo, te aviso, te advierto
esperanza en espacio solo busca
porque aquí Tanatos viaja encubierto.

En este sanatorio se besa la tierra
dulce beso con el cuerpo exacto y caído
donde la vida se desperdicia y se cierra.

En este sanatorio de ojos fui dolido
demolido de mis adentros desentierra
la virtud de mi pobre suerte y redimido.

El sanatorio de los ojos rojos
en ejercicio de derecho pleno
palpa realidad en suave vida
en sueño mío.


​

 

vamos hasta caer

y tocar el fondo

de las cosas que se acurrucan

de las cosas oscuras

en la punta de la lengua

que se asemeja a la serpiente

dibujada en tus muros

vamos hasta caer

escandalizados sobre las flores

sobre el agua

y las cosas menos comunes

escondidas entre las azucenas

decible verso en el veneno

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YO

 

Eso es Dulce Semejanza, las azucenas y el veneno recuerdan todo lo que somos.

Preferí llamarle "Sanatorio de Ojos" rojos a decir cementerio. Para mi un cementerio sana de la verdadera enfermedad, LA VIDA.

¿Pero que sería de la vida sin veneno ni azucenas?

Un abrazo oscuro.