El Sentido De La Vida

No esas gárgolas como tuberías picadas en el baño que nos transforman en
burbujas,)
los bordes de un momento estrellado son nuestro orfanato,
las venas de las hojas son nuestras ciudades en cinta.

No esas voces del sueño de los mastines elásticos del bronce de los
campanarios,)
la enfermedad de vivir es el sentido segregado por la paroxiticina del cerebro,
la química orgánica detrás del nervio óptico que visualiza el mar.

No la pizarra vacía con las frases de un dios de los sentidos,
el soma de hormonas del que te alimentas es el maná de los futuros,
viviendo para la barriga centrándote en tus nervios genitales.

No el satori de los fuegos sobre la laca del excremento de la pasión,
el resultado del viejo perdedor en la ruleta rusa de la existencia,
el enigma de ser por fin resuelto y momificado por las abejas.

Es el flujo del existir sentido por sí mismo,
el discurrir en el tiempo bajo la madre de la totalidad,
el aprendizaje continuo que deja nuestra luz.

Es la vida vivida por sí misma.

 

Me gusto, reflexivo y profundo, estrellas para vos.Patricia.

 

Y cada quien a su manera, porque la totalidad no es una sola, sino mas bien un paradigma articulado desde y para sí, que se descubre, que se repele, que se atesora y se moldea. Y si bien es urgente comprometer nuestro propio ser al camino de la luz (que cada quien debe encontrar su propio interruptor, eh?) la gracia no está en llegar, sino en todo lo que encuentras en la travesía... y aunque no siempre me agrada, a veces también tomo sopa...