el sentido de la vida

¿para qué coño vive uno realmente?
¿para qué vives tú, amado lector que pierdes tu tiempo
leyendo las estupideces que escribo?
¿para qué mierda vives, cabrón? le pregunté el domingo
a mi compadre eliodoro que renta sombrillas en la playa
él me miró entonces con sus ojos abotagados de alcohólico
"qué putas preguntas haces, villa, mejor invita una cerveza"
fui por un seis de cerveza y me senté a tomar con mi compadre
era una tarde soleada y la playa reventaba de gente
eliodoro había rentado todas las sombrillas
el cielo tenía un tono azul radiante y mágico
la cerveza helada bajaba por mi garganta como si mi garganta
hubiese sido una compuerta abierta del canal de panamá
un avioncito de acrobacias daba vueltas a media altura, allá
sobre el mar, a unos trescientos metros de la playa
eliodoro y yo lo observábamos
los bañistas refocilándose entre las olas lo observaban
las chicas de piel dorada y cimbreante culo en tanga
se mostraban enfadadas ante el hecho de que las maniobras del avioncito
acaparaban las miradas del público desairando la visión de sus cimbreantes culos
(¿para qué puta madre se habían puesto entonces aquellas putas tangas
si la concurrencia no hacía ni puto caso de sus cimbreantes culos?)
el avioncito se entretuvo haciendo piruetas un buen rato:
se elevaba verticalmente hasta determinada altura
se quedaba detenido en un punto del espacio durante dos o tres segundos
se lanzaba en picado hasta casi tocar la superficie del mar y entonces
giraba bruscamente de nuevo hacia arriba en el último instante;
luego comenzó a dibujar letras en el aire utilizando
un chorro de humo que expulsaba por la cola:
la primera letra que dibujó fue una "a"
la segunda letra fue una "m"
la tercera fue una "o" que dibujó mientras rizaba el rizo
la cuarta letra fue una "r" y cuando terminó de dibujarla
algo debió ocurrir que hizo perder el control del avioncito al piloto
llevándolo a terminar estrellándose en el mar instantes más tarde;
sobre la playa cundió entonces una oleada de silencio sepulcral
mar adentro se elevaba una columna de humo negro en el punto
donde el avioncito había sido engullido por las olas
el sol brillaba como mil estrellas desintegrándose en el fondo de la galaxia
los bañistas se abrazaban con quien tuvieran a un lado en una especie
de gesto de apoyo y comprensión al piloto fallecido
yo abracé a una de las nenas en tanga que pululaban por allí
la palabra "amor" aparecía nitidamente dibujada en lo alto del cielo
"allí tienes tu puta respuesta, villa", me dijo entonces eliodoro:
"vives para revolotear un rato de acá para allá con el pretexto del puto amor
y luego te descontrolas y te hundes y terminas hecho una mierda en el suelo"

yo le di un trago a mi cerveza y coloqué distraídamente
mi mano sobre el culo de la chica a la que aún seguía abrazado

de pronto comenzaban a surgir respuestas por todos lados

 

No da para ser un desgraciado por mucho rato con semejante panorama diario eh!
Con algo así, quién necesita anestesiarse... Pero bueno, "Dios le da pan al que no tiene dientes"
y aviones a quienes no sabemos pilotear.

Imponente.

Besos!

 

Qué sabio eliodoro....

Genial entrega!! felicidades mezcladas con tangas y el humo de la playa .

Palmira

 

Qué gran poema Villa. Me gustó mucho
Saludos

 

¡Impactante! Más para los ojos que para la mente que aun no se acostumbra a la mezcla existente en estos versos tuyos. Saludos.

 

je je je ...
ves que todo tiene un porque y que bien sabes disfrutar de las distracciones..muakk

 

Excelente descripción del ambiente en la playa, es tal cual! Muy bueno el relato.
Saludos:
Paloma.

 

Me recuerdas a tantos de mis escritores favoritos... no son letras innovadoras ni revolucionarias, pero en todo momento se recrean en cánones clásicos del realismo sucio...

 

Que pregunta! Sr Villa

 

Hermosura, grandioso poema, maravilloso.