El Tamaño del Ángel

Hay tardes en que el ángel de la esperanza
harto de tanto pedimento
baja desde su sitial
desenvaina su mandoble
y con un tajo minucioso
corta el telón de nuestra historia
para mostrarnos el valor de una arruga
en la cara de cualquier hombre o mujer.

El delirante relieve humano
marcado por la risa,
por las puertas, por la sombra,
por la ceguera, por los muros que se achican,
que se agrandan, que se rompen,
por la noche estrellada, por las mejillas empapadas.

Hay tardes,
en que parece que el tiempo se ha detenido
y el amarillo de las nubes iridescentes
nos rodea con su color espectral.

Nos rodea para impedirnos
olvidar el lento y enconado trabajo
para labrar un surco en nuestra piel.

Hay tardes,
mientras palpamos
la hondonada en nuestra mejilla,
que entendemos lo inabarcable de nuestra ruta.

 

Profundidad de verso libre refleja tu obra poetica amigo, me gusto bastante, el meditar sobre la vida y las cosas mas simples que parezcan nos permite ver tantas cosas de esta vida, sobre todo de la propia. Felicidades, un placer saludarte.

 

Antes que nada bienvenido sea usted poeta.
La esperanza es cada día mas grande, el tamaño de su ángel es inmenso. Saludos.