El verbo elevado a la potencia numérica.

El número

que replicado es elevado

a la potencia cero

se conecta

con el sí mismo del hombre

a un mismo exponente


purifica la conexión

acelerando la sucesión

del mismo número

replicado indefinidamente

hasta haber alcanzado en la mente

la proyección neural


que abre psicológicamente

la relación del verbo

con su matriz

confirmando el enlace


programando

la raíz cúbica

del número cero potenciado

en el enlace

a la palabra sagrada

fijando la línea conceptual

en fase unívoca

a la capacidad mental


que en el hombre

se ha de perfeccionar

uniendo la hebra que falta

restableciéndola

con la sucesión numérica


mesmerizando la percepción

desatando el nudo corredizo del alma

reduciendo la potencia a cero

perfeccionando la secuenciación


replicándola

hasta llegar

más allá de la unidad

tras el velo de la materia

abriendo el enlace

desplegando en la mente

el mapa emergente de la consciencia.



Se formará un plano que converja

con la réplica del número exponente

de la potencia total

a cero equivaliendo


creando un foco amnésico

que entenebrezca

la apertura del velo

en el momento

que el verbo resplandezca

en el centro del pensamiento


permaneciendo inflexible

ante la programación

del flujo de información

secretado

en cada hipnótica sesión

mentalmente secuenciando el filtro

magnetizando la visión


formando una elíptica proyección

donde el cuadrado

sea penetrado por la hebra dorada

que una vez disipada

afiance el mecanismo de control


desde el punto

donde cada flexión del pensamiento

se halla fasado

invocando al magnetismo

acrecentando su implosión


enlazando la idea

elevando el número

a la sagrada potencia

potenciando la periférica visión.



Se unirán palabras

formando una oración

al núcleo infinito de procesamiento

asociando hipnóticamente

cada secuenciación


en un número

si ha sido replicado

con ese verbo asociado

al íntegro centro del alma

regresando a la consciencia


tras haber procedido

a la desfragmentación

de ese vínculo focal trenzado

que atraviesa en la mente

el agujero de gusano

atrapando

cada neura del pensamiento

dando coherencia a la oración


siendo invocada en cada sucesión

del número elevado

a la potencia cero

con infinita permutación


desfragmentando la psique

cohesionando su núcleo fijador

al resplandeciente verbo

absorbiéndome en su mimetización


entre basculaciones numéricas

a velocidades extremas

elevando a cero

del pensamiento su exponencia


penetrando en el Reino

a través del hipnótico destello

procesando la variable acumulada

mentalmente unificada

con el dibujo de la línea quebrada


resolviendo el enigma del verbo

en carne hecho

replicando la fase sucesiva

de la indefinida hebra dorada


recubriéndose de una sintética fibra

donde la palabra sagrada

arde y a un alma carboniza

dándole paso al templo

restaurando el número completo


combinando cada réplica

en la mente transmutando

la sombra de la idea

en luz más refulgente

de santísimas flamas eónicas

de paroxismo coherente


ante esas fórmulas arcanas

triangulando palabras

en operaciones inabarcadas

con números elevados

que basculan al alma


en reflectantes combinaciones

replicándose el hombre a sí mismo

pensando en un trance contínuo

sometiendo a la mente

a la operación elevada


potencialmente

a un exponente perpetuo

verbo resplandeciente que conecto

a aquellas supremas ideas

adoradas en su templo


en un cielo de concatenación plena

dando pauta al buscador de sentido

primero desordenando la órbita

alrededor de cada planetario centro

en uno mismo


luego reordenando el infinito

en cada replicación numérica

calculada por el verbo

que las ha resuelto

y al alma redimido


en cada zona del pensamiento

un número de serie

las ideas han constituido

afianzando cada centro infinito

definiendo lo indefinido


en el suburbio de la mente

construyendo un edificio imponente

en una obra ingente

donde la sombra de una idea

se hará luz

en la casa suprema


que en su consumación

exponencialmente se eleva

a la infinita potencia

dando la clave que genera

la apertura de la conciencia eterna


buscando y encontrando

la ciencia perfecta

uniendo el verbo

como palabra resurrecta

al número e implemento

de la casa que se conserva.


Ahora recuerdo

salgo de mi estado de amnesia

me doy cuenta

que el cerebro contiene esa clave

si pensamos

en el centro de la nave

que se eleva


resolviendo el problema

de la antimateria

aplicando la única variable

al hombre aspirante a lo eterno

que se libera


resolviendo el misterio del unus deus

haciendo exacta la unificación

la palabra y la numeración

elevando a cero la conciencia.


Fin.

Romanovski. ©.