El viejo y el tiempo.

Ahí va el viejo
acompañando al tiempo
a paso ligero y bastón en brazo,
van platicando
de los días y de las horas


Ahí va el viejo,
queriendo ganar el paso,
dudando del tiempo
que lo mira de costado,
y el tiempo lo arrulla
con palabras suaves
que confunden su paso.

Y el viejo y el tiempo
siguen derecho con el rumbo fijo
hacia el ocaso.

 

Muchas gracias!

 

¡Magnífico!

 

Al mismo paso y con la misma compañía. Inevitable el sendero. Un placer dejar mi firma. Saludos.

 

Precioso poema, el ocaso es la vista preferida del tiempo por alguna razon va como un río imparable hacia el horizonte de nuestras vidas. Saludos amigo un placer pasar por tus hermosas letras.

 

Saludos! me alegra mucho sus comentarios.

 

Espléndida muestra de poesía preciosa y magistral.

 

Grandiosa calidad en una obra excepcional.
Maravilla de creación divina.

 

Muchas gracias por sus palabras.