“ Ella es…”

Cierra los ojos acompáñame a un lugar donde los coquis todavía cantan, donde en la mañana es el sol quien nos levanta.
Dame la mano acompáñame a caminar dejando que las olas nos acaricien los pies, que el viento parpe tu piel.
Ven dibújame un cielo lleno de colores, mientras para ti recojo caracoles. Tú eres todo lo que pude pedir, más de lo que merecía recibir.
Tú eres arena hecha piel, del panal la dulce miel. Tú eres todo lo que pude pedir, más de lo que merecía recibir.
Ven junto a mi, mientras te canto: “Aquí no hay miedo, aquí no hay dudas, aquí no hay llanto”. Aquí solo somos tú y yo, viendo como se esconde el sol desde el ámbito.
Al ver tus ojos, tratare de no besarte; y aunque mil ganas tengo de parparte, prometo no tocarte.
Tú eres arena hecha piel, del panal la dulce miel. Tú eres todo lo que pude pedir, más de lo que merecía recibir.
Poco a poco aparecen las estrellas, y con ellas contamos uno a uno los cometas, y las letras que componen esta tu canción.
Mari recuesta tu cabeza sobre la arena, déjame admirarte bajo la luna llena. Su luz te hace brillar, mientras nos deleita con un manto de diamantes sobre la mar.
Tú eres arena hecha piel, del panal la dulce miel. Tú eres todo lo que pude pedir, más de lo que merecía recibir.
Tú eres...
Quiero decirte que no me canso de soñarte, que nunca dejare de amarte, que de mi eres la mejor parte. Abre los ojos trata de no olvidarme...

Por: Lexxier (José I.) Cruz

 

hermosa prosa poética, hermosa, sus palabras llevan a ese mundo de ensueño del que nadie quisiera despertar cuando el amor es compartido.

un cordial saludo