-Ella- Mi doble personalidad.

-Ella- Tayra-

Triste y dañada como debe ser,
Así debí permanecer, el la oscuridad,
Arrastrándome, atormentando
Con mis espíritu de suicida radical,
Así debió de ser.

Y si muero hoy, no podrán decir que no lo decidí
Tanto tiempo rondando por aquí
En mi cabeza gritando la verdad:
No debió de ser así
No quería dar tanto de mi,
No estuvo bien el amar así

Y no puedo parar, de gritar
Dentro de mi cabeza,
Que ella es la única que controla mi interior
Que si lloro es por estúpida
Y no quiere dejarme regresar,
Me hace volverme a odiar.

Estoy a salvo mejor así
Planeando la manera de morir
Al menos es algo seguro
Que si me marcho, me largo por mi propia mano

La quiero dejar salir, a jugar un rato, a que estremezca todo mi ser
Planeando la mejor forma de matar todo el dolor
Que hierve mi corazón.

No quiero regresar otra vez, no quiero volver
Y lo que viene juro que va a doler,
Y se que seré quien caiga primero bajo mis propios pies
A querer lamer la sangre que derrame. ​

Por: Fernanda Sevilla y Tayra

 

interesant escrito amiga.... saludos desde panamá...

 

Noto como estamos en la era de los seres con múltiples personalidades, afortunadamente tú tienes solamente una, hay otros que dicen tener hasta cinco y creo que nunca liberan a ninguna. Prefieren verla dormida que dejarla salir y quizás esa es la mejor manera de exorcizarla y deshacerse de ella, si es lo que te apetece.

Buen poema. Saludos,

 

Profundo y gran poema Fernanda. Me ha encantado. Dejas unos sentimientos muy fuertes y desgarradores. Se permutan las personalidades y prevalece el deseo de muerte. Me he sentido identificado en muchos momentos. Enhorabuena poeta y te dejo mis cinco estrellas.

Un bexo de tu amigo Xuacu.:::hug:::

 

complejidades de dos, unificador de versos, ni pensar que en mi siete luchan por sentir. genial poema

 

dobles personalidades, Interesante te ha quedado tu poema amiga fersevilla, saludos

EDU

 

Todos tenemos una alternancia de personalidades, que surgen de cuando nuestro escenario es modificado por una constante, es buen reflejo de nuestros temores internos que siendo opuestos a nuestro cosnciente, emergen entre la sombras moldeando nuestro ser.