Ellos son mi vida.

Abro los ojos,
traspaso la línea que separa el sueño de la realidad,
fuerzo el cerrar los ojos para regresar al mundo de los sueños,
mundo que fascina lleno de imprevisibilidad.

Abro los ojos,
Traspaso la línea que separa el sueño de la realidad,
me aferro con fuerza al mundo real,
ahora es el mundo que me fascina con su imprevisibilidad.

Son mi alegría y regocijo en ambos mundos,
pero les requiero con mayor intensidad en mi realidad,
donde les disfruto conjugando todos mis sentidos,
y trasladando lo vivido nuevamente a mis sueños

Abro los ojos,
quiero disfrutar de su despertar,
él remolón y perezoso,
ella sonriente y juguetona.

Me convierto en su guía,
guía al que dan la mano para dejarse acompañar
en ese camino diario que deben recorrer,
para traspasar esa línea divisoria tan unida al despertar.


Grato es acompañarles por la mañana a la escuela,
observando cómo compiten por conseguir mi sonrisa,
por reírse más alto con cada una de mis bromas,
por conseguir el mayor número de besos antes de mis despedida.

Cuántas son las ocasiones en que aparecen en mis pensamientos,
dónde estarán, qué harán, cómo estarán,
maldita ventana que no puedo abrir,
para poder contemplar su devenir.

Esa necesidad de saber de ellos es la que me empuja,
a ese momento diario de contar y que me cuenten,
de abrir su mundo mágico,
de empaparme de su visión particular del mundo, por mí ya perdida.

Es agradable el momento previo al regreso a los sueños,
acompañarles en ese instante permite seguir disfrutando.

El cansancio se apodera de ellos incitándoles a dar el salto,
empieza su danza ritual, posicionamiento en el sillón,
acercamientos al lugar donde yo estoy,
requieren caricias, por su pelo, espalda y rostro,
llaves que permiten abrir la puerta al mundo de los sueños.

Trasladarles a su cama, arroparles, besarles la mejilla,
contemplar sus ojos cerrados y el rostro relajado,
dar la vuelta para salir de la habitación, apagar la luz,
y siempre antes de salir escuchas a tu espalda
una dulce voz que te dice "buenas noches",
sin darse cuenta que con ese pequeño detalle,
consiguen que mi noche comience siendo buena.​

 

Hermoso sentir a tus hijos mi estimado compañero que enternece el alma con esas palabras tan dulces, tan sentidas, tan vividas. Me fascinó. Gracias por esta exquisita poesía. Te dejo reputación merecida, estrellitas y un beso. Qué tengas un grandioso fin de semana!

 

GUSTAPOESIA, excelentes versos un placer haber pasado. Felicidades

Saludos,
desde Panamá.

 

que bello poema,exquisitos versos que transmiten ternura ... muchas felicidades gracias por compartir. saludos

 

GUSTAPOESIA, excelentes versos un placer haber pasado. Felicidades.

Saludos,
desde Panamá.

 

Gracias por parar en estas líneas y por tus comebtarios Rosa de la Aurora